Los principales referentes de Juntos por el Cambio buscan por estas horas acercar posiciones entre ellos y los precandidatos para acordar el código de ética con el que quieren evitar que siga escalando la pelea interna en el marco de la campaña y evalúan cuándo avanzar con esa presentación.

En medio de un clima de tensión entre la UCR, que respalda en la provincia de Buenos Aires a Facundo Manes para las primarias de precandidatos a diputados nacional, y el PRO, que impulsa a Diego Santilli, apuran una solución que permita bajar el tono de la disputa.

"El sábado vamos a presentar los jefes de los partidos un código de ética que va a poner límites concretos", indicó recientemente la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, en declaraciones televisivas.

Según indicaron a NA fuentes del espacio opositor, el borrador de ese manual de conducta ya está en poder de los principales referentes de la coalición y consistiría en 10 reglas para establecer qué se puede hacer y qué no en la contienda electoral.

Sin embargo, en las últimas horas se empezó a manejar la posibilidad en el frente opositor de esperar para esa presentación y seguir tratando de acercar posiciones a fin de lograr un consenso importante en torno a las reglas de juego.

Bullrich justificó la necesidad de contar con una herramienta de ese tipo al afirmar que las primarias (PASO) son como "un partido amistoso, tiene que haber amistad cívica" y agregó: "No pelearnos entre nosotros, que en noviembre vamos todos en la misma lista".

En ese contexto, también está en proceso de definición cuándo será la próxima reunión de la mesa nacional de Juntos por el Cambio, que suele encontrarse de manera virtual o presencial los lunes de cada semana.

El último jueves, el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, acusó al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, de llevar a cabo una "campaña de desprestigio contra Manes" y advirtió con no volver a sentarse en esa mesa de dirigentes "hasta que paren".

La dura advertencia del referente radical fue un capítulo más de la pelea que inició cuando Manes cuestionó a Rodríguez Larreta, a Santilli y a su armado político, tras lo cual salió a cruzarlo la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió.

La dirigente, que apoya la postulación de Santilli, acusó a Manes de "mitómano" por haber dicho que ella le había ofrecido ser su candidato a vicepresidente en 2015 y remató: "En Juntos por el Cambio tenemos una regla que es no mentirnos. Podemos tener discusiones pero todos tenemos amistad política. Este señor miente descaradamente".

Si bien en el sector de Manes minimizaron la pelea y en el búnker de Rodríguez Larreta mantuvieron su línea de no confrontación, el clima se tensó aún más con la irrupción de Morales, un dirigente de peso dentro de la conducción nacional de la UCR.