Luego de que la Justicia Federal de San Martín rechazara una medida cautelar para que vuelvan las clases presenciales a Vicente López, el intendente de ese municipio, Jorge Macri presentó un recurso de amparo ante los tribunales bonaerenses con el mismo reclamo.

"Vamos a tener que convivir con esta enfermedad por mucho tiempo y habrá que ser flexibles para entender el nuevo escenario, en especial en el área educativa", justificó el jefe comunal del PRO.

En declaraciones televisivas, dijo que "hay una gran convicción en el mundo educativo de que las clases no sólo son necesarias, sino que son importantes para la salud emocional de los chicos, donde además no han sido una fuente importante de contagio".

El juez federal subrogante del tribunal número 2 de San Martín Oscar Papavero se declaró incompetente para resolver el litigio y rechazó la cautelar a primera hora de esta mañana, cuando comenzó a regir el decreto 241 que el Gobierno nacional dispuso para el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), incluyendo la suspensión de la presencialidad escolar hasta el próximo 30 de abril.

Papavero desestimó la presentación al señalar que "no basta para confrontar, sin más, las decisiones gubernamentales de suspender provisoriamente la presencialidad en las escuelas, refutando las causas en que las autoridades las fundan".

Mientras en la provincia de Buenos Aires las clases se encuentran suspendidas en cumplimiento del decreto 241, en la Ciudad de Buenos Aires las aulas volvieron a abrir a partir de un fallo judicial dictado en la noche del domingo ante la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo porteño.

Al analizar al conflicto que enfrenta a los gobiernos nacional y bonaerense con el porteño, Macri sostuvo que "el detonante fue el mecanismo de la toma de decisiones" que utilizó el presidente Alberto Fernández. 

"En el pasado, otros anuncios similares tuvieron un marco de diálogo. (Axel) Kicillof y Alberto Fernández, (Horacio Rodríguez) Larreta, los intendentes...todos tuvimos consenso. Esta vez el presidente decidió solo, y el gobernador habló con los intendentes de su propio espacio político, no con todos los mandatarios. Todo esto ocurrió entre la angustia de la gente que ve que las decisiones se toman desde un solo lado político, y generan aún más tensión", reflexionó.