El jefe de Gobierno porteño electo, Jorge Macri, se encuentra por estas horas dando los ajustes finales a su Gabinete que asumirá el próximo 10 de diciembre en la Ciudad.

Esta implementación, confirmada por Noticias Argentinas, incluye la creación de una nueva cartera de Infraestructura y la reorganización de las áreas de Justicia y Seguridad, así como la eliminación de la cartera de Gobierno.

El proyecto presentado a la Legislatura local propone una reestructuración organizativa a partir del 10 de diciembre de 2023, con el objetivo de mejorar la gestión y el desarrollo de políticas públicas.

Los nombres y los cargos clave son: Néstor Grindetti asumirá como jefe de Gabinete, mientras que Gabriel Sánchez Zinny será el vicejefe de Gabinete.

Waldo Wolff se desempeñará como ministro de Seguridad, con Diego Kravetz como su vice. Gabino Tapia asumirá el cargo de ministro de Justicia, y Roberto García Moritán será el ministro de Desarrollo Económico.

Según el texto a debatirse, esta reorganización es una "herramienta central para la consecución de los objetivos planteados" y busca adaptar las competencias de los distintos Ministerios y Secretarías a las necesidades actuales de la gestión.

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Los cambios más destacados incluyen la división del actual Ministerio de Justicia y Seguridad en dos entidades separadas, con el primero enfocado en el control del sistema de prevención de la violencia y delito, y la gestión administrativa de la Policía de la Ciudad.

El segundo coordinará las relaciones con el Poder Judicial y las acciones para el traspaso de la Justicia Nacional al ámbito porteño.

Además, la cartera de Desarrollo Económico y Producción se verá modificada, eliminando la función de producción, y el Ministerio de Gobierno, actualmente dirigido por Jorge Macri, dejará de existir.

En su lugar, se creará el Ministerio de Infraestructura, encargado de supervisar la planificación y programación de obras viales y subterráneas, así como la gestión del transporte y del ordenamiento del tránsito.

César Torres, Fabián Tunes y Ezequiel Sabor, cercanos a Jorge Macri, están también previstos para ocupar roles importantes dentro del gabinete porteño, aunque sus posiciones exactas aún están por definirse.

Estos cambios reflejan un enfoque renovado en la gestión de la ciudad, con un énfasis en la eficiencia y en las demandas actuales.

A diferencia del armado que tiene el saliente jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, los radicales y otros socios de Juntos por el Cambio no tendrán lugares relevantes. Pierden el manejo del Banco Ciudad y el ministerio de Desarrollo Económico.