El empresario Hugo Sigman, dueño del laboratorio mAbxience que produce el principio activo de una vacuna contra el Covid-19, aclaró que su compañía "no es propietaria de la vacuna ni la encargada de venderla" y no tiene "postestad o influencia para decidir en qué país se realiza la formulación del principio activo producido en la Argentina y el llenado de los viales".

"El equipo científico y técnico de mAbxience, que se encarga de producir el principio activo de la vacuna de AstraZeneca, trabaja contrarreloj desde noviembre del 2020, con un profundo compromiso, para lograr los objetivos acordados. Pero mAbxience no es la propietaria de la vacuna, ni la encargada de venderla, cobrarla, ni de firmar los contratos con los gobiernos o establecer las fechas de entrega", explicó el empresario a través de una columna de su autoría que hizo circular.

Sigman sostuvo que su laboratorio "ha sido seleccionada, en un reconocimiento al capital humano y científico argentino, para producir el principio activo, como parte de un proyecto que tiene como objetivo abastecer de la vacuna a precios accesibles a los países de nuestra región".

"Quisiera insistir en este punto: ni mAbxience ni yo hemos acordado ni firmado ningún contrato con el Ministerio de Salud de la Argentina, ni de ningún otro país, por la vacuna contra Covid, ni hemos cobrado dinero alguno de ningún gobierno por su fabricación o venta", ratificó.

En tanto, agregó: "Tampoco tenemos potestad o influencia para decidir en qué país se realiza la formulación del principio activo producido en Argentina y el llenado de los viales. Se ha dicho también que yo incidí sobre algunas autoridades del gobierno para impedir un acuerdo con Pfizer para la adquisición de su vacuna. Desconozco los motivos por los cuales el Estado Nacional no ha llegado a un acuerdo, pero no tuve influencia ni participé de esa decisión".

Asimismo, sostuvo que su grupo "mantiene una relación de trabajo con Pfizer". "Sinergium Biotech, compañía de la cual soy uno de los accionistas, fabrica para Pfizer la vacuna para prevenir la neumonía", indicó.

"Además de infundada, la versión es ridícula. ¿Qué interés, personal o empresarial, podría tener en impedir un contrato para la compra de vacunas entre el Estado Nacional y otro laboratorio? ¿Fabricar más principio activo en una empresa de mi propiedad? La idea no se sostiene: en diciembre del año pasado mAbxience tuvo que rechazar solicitudes de otras compañías farmacéuticas porque había comprometido toda su capacidad de producción del año 2021 y parte del año 2022", remarcó.

También subrayó que "díficilmente" su empresa podría "obtener un beneficio evitando que la Argentina compre la vacuna de Pfizer o de cualquier otro laboratorio". "De hecho, el Estado ha adquirido dosis de Sputnik V y de la vacuna de Sinopharm y negocia con otros proveedores", expresó.

Y concluyó: "Además, la cuota argentina del principio activo fabricado por mAxience no alcanza para cubrir las necesidades de nuestro país, por lo que es imprescindible contar con otras vacunas. En otras palabras, las vacunas no son excluyentes. El problema no es la demanda de vacunas; es la oferta. Salvo Israel, Estados Unidos y Gran Bretaña, todos los países experimentan retrasos en la llegada de las dosis comprometidas".