Tal como vaticinaban tanto la experiencia europea como las advertencias de los principales referentes sanitarios de nuestro país y el
mundo, más que una segunda ola de la pandemia, nos enfrentamos a un auténtico tsunami.

El mensaje y la panorámica con los principales referentes del Frente de Todos en la localidad de Ensenada demostraron ser un claro mensaje de unidad y respaldo a las medidas tomadas por el presidente Alberto Fernández. 

Quienes encabezan una oposición desestabilizadora y a contramano del reclamo social, lejos de alinearse a los tiempos de unidad en pos del cuidado de la vida, parecen querer todo lo contrario, primando el cinismo y la mentira como formas de hacer política.

Cuando Alberto dice que es momento de "hacer aquello que se debe, en el momento apropiado", va en sintonía con la toma de decisiones de los principales líderes mundiales. No hace mucho y en virtud de la asunción del nuevo presidente de los Estados Unidos de América, Joe Biden, el papa Francisco destacó que vivimos en "un momento en que la grave crisis que enfrenta nuestra familia humana reclama respuestas unitarias y visionarias, guiadas por la preocupación de construir una sociedad marcada por verdadera justicia y libertad, junto al respeto por los derechos y la dignidad de cada persona, especialmente los pobres, los vulnerables y los que no tienen voz".

Si bien estamos pasando momento dificilísimos, la reconstrucción argentina no es un slogan, ni una pieza de marketing. Es una realidad que aun en medio de esta cruenta pandemia, se refleja en la realidad de las y los argentinos.

El Gobierno nacional espera un crecimiento del Producto Bruto Interno del 7% como base para 2021, a partir de los indicadores que ratifican una consolidación de la recuperación de la actividad, el empleo, y el fortalecimiento de las cuentas públicas. En sintonía y según estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), la economía argentina crecerá un 6% en 2021, por lo que se recuperará este año un poco más de la mitad de lo perdido durante 2020 a raíz de la pandemia y de la crisis, y el país verá incrementado el balance de su cuenta corriente externa en 2,3%.

Por su parte, el Banco Mundial mejoró la perspectiva de crecimiento para la Argentina en 2021 y prevé un rebote de 6,4%. En lo que refiere a la salud de los argentinos, las vacunas no dejan de arribar y los acuerdos con los principales laboratorios del mundo, junto a la liberación de las patentes, auguran un futuro prometedor.

La exitosa gira del presidente por Europa, donde cosechó el apoyo de gobiernos importantes en tiempos de crisis para avanzar con la renegociación de la deuda externa, es también una señal de los buenos tiempos que se avecinan luego de tanto sacrificio por parte de la sociedad toda.

La producción local y el aceleramiento del plan de vacunación, los incentivos para quienes nuevamente deberán bajar su producción o cerrar durante algunas semanas sus fuentes de ingresos, son los últimos esfuerzos que todas y todos como sociedad tenemos la obligación de hacer.

No podemos pensar de manera individual ni dejar que un año electoral empañe nuestro objetivo principal que es salvar vidas sin detener el aparato productivo del país y continuar la reconstrucción nacional de cara a un futuro de felicidad y justicia social para todas y todos los argentinos.

(*) - Hernán Torres Guerrero es subsecretario de Articulación y Comunicación Comunitaria del Ministerio de Desarrollo Social de las Nación y presidente de Partido del Trabajo y la Equidad de la provincia de Buenos Aires.