El referente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) Juan Grabois propuso hoy un "salario universal" y aseguró que "soretes hay en todos lados", al
cuestionar a las organizaciones que amenazan a los beneficiarios con la pérdida de los planes si no participan de movilizaciones.

De todos modos, dijo que "no son la mayoría" de los movimientos sociales los que apelan a ese pedido, al defender de las críticas que en ese sentido expresó el ministro de Desarrollo Social bonaerense, Andrés "el Cuervo" Larroque, al asegurar que "hay que redefinir" el sistema.

Grabois aclaró que la presencia de "grupos cuasimafiosos que obligan a la gente a militar y a marchar es la imagen distorsionada de gente de derecha, izquierda y centro, etc., que no reconocen al movimiento más innovador y brillante de la Argentina que lo que hace es inventar trabajo de la nada con un
presupuesto ínfimo".

Solicitó, además, tener "empatía con la gente desesperada que pide trabajo y dejar de pensar que la conflictividad de la Argentina son las organizaciones sociales".

El dirigente social sostuvo que el Polo Obrero "contiene 60 grupos que, si no estuvieran desfilando en la 9 de Julio, no se imaginan qué estarían haciendo", y advirtió: "Ustedes no saben lo que hacemos para mantener la paz social".

Ante la necesidad del ordenamiento de los planes respecto al rol de los movimientos sociales, afirmó en declaraciones radiales que "no es una práctica habitual" hacer uso político de los beneficiarios de los sectores vulnerables.

Al respecto, Grabois confirmó que "hubo solo un 2% de las personas bajadas del padrón", lo que puede haber ocurrido por la falta de la contraprestación del beneficiario, pero sostuvo que "hay una instancia de reclamo" para certificar esa situación y "el primer mes se le descuenta el 50% del salario".