El nuevo jefe de bloque de diputados del Frente de Todos, Germán Martínez, trabaja en sus nuevas tareas: convencer a la mayor cantidad de funcionarios para que se pronuncien en respaldo al acuerdo trazado por el Gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y activar los mecanismos ante las Sesiones Extraordinarias.

En diálogo con Metro 95.1, Martínez destacó que al apoyo a la negociación con la entidad financia es "un tema de gestión" que debe ser aprobado con mayor cantidad de votos posibles. “Es un tema de gestión, no creo que se pueda resolver con temas de libertad de conciencia. Lo que quiero es que el proyecto se apruebe con el mayor respaldo posible, y que el bloque vote de la forma más convergente posible”, declaró el funcionario.

Asimismo, hizo énfasis en la dificultad de intentar convencer a sus pares de la Cámara en algunas semanas. “No es fácil levantar el teléfono y hablar con gente que vi pocas veces y decirle: '¿qué pensas sobre el acuerdo?' Necesito tiempo y tener el pulso más ajustado para tratar de arrimar a cada compañero. Necesito votos y poder procesar las distintas miradas que hay”, señaló el diputado.

En torno a la renuncia de su antecesor, Máximo Kirchner, Martínez sostuvo que no es quién para cuestionar su decisión, y afirmó que el trabajo del dirigente de La Cámpora le facilitó la tarea dado que dejó “todo ordenado”. En la misma línea, sostuvo: “No me siento heredero, me siento un continuador de la tarea”.

Germán Martínez se define "kirchnerista y peronista sin contradicciones". En sus descripción contó que en 2002 se acercó al kirchnerismo, aunque aseguró no mantener diálogo fluido con la vicepresidenta. "Con Cristina (Kirchner) no tengo un diálogo permanente, intentaré construirlo. Será un gusto y un placer", confesó. 

A pesar de esto, le prometió al Presidente que “hacer lo imposible para persuadir a cada compañero” de la Cámara. “No doy por perdido ningún voto, porque estoy convencido de que el acuerdo con el FMI planteado por el Presidente nos genera esa ventana de tiempo que es lo que se necesita para consolidar esa ventana económica”, ponderó el funcionario.

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Entre las nuevas tareas, el diputado reconoció que debe tomar contacto con sus pares para poder abordar el tema, y por el otro, trabajar en la agenda de sesiones extraordinarias convocadas por Alberto Fernández. “Al mismo tiempo que tomo contacto con mis compañeros también tengo que activar todos los mecanismos para sesionar”, sostuvo.

Por último, contó que habló con los presidentes de los bloques opositores para “pedir más tiempo” que le permita ordenarse.