La canciller Diana Mondino escribió hoy un picante tuit sobre la presencia de su par británico, David Cameron, en las Islas Malvinas y sostuvo que valora "el gesto" de haber incluido "a la Argentina en su visita a la región".

"Valoramos el gesto del Canciller de UK Cameron de incluir a la Argentina en su visita a la región. Estaremos felices de recibirlo, en una próxima ocasión, también en Buenos Aires", escribió la funcionaria en la red social X.

De esa forma, envió a Gran Bretaña un mensaje acerca de la soberanía argentina sobre el archipiélago.

X de Diana Mondino

No obstante, el Gobierno, en el marco de la política internacional dispuesta por el presidente Javier Milei, prefirió evitar un pronunciamiento de condena por la visita de Cameron a las Islas, adonde llegó este lunes.

En cambio, el gobernador de Tierra del Fuego, el peronista Gustavo Melella, declaró "persona non grata" a Cameron, y agregó: "La presencia de @David_Cameron en nuestras Islas #Malvinas configura una nueva provocación británica que busca menoscabar nuestros legítimos derechos soberanos sobre nuestros territorios y sostener el colonialismo en pleno S.XXI. No lo vamos a permitir".

Al repudio de Melella, se sumó en las últimas horas el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, quien consideró la visita como "un acto de profunda provocación a la memoria de nuestros héroes que entregaron su vida".

También se plegaron con mensajes condenatorios a la presencia del funcionario británico en las Malvinas otros gobernadores como Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Alberto Weretilneck (Río Negro), Ricardo Quintela (La Rioja) y Sergio Ziliotto (La Pampa). 

Por su parte, la gestión libertaria apuesta a una estrategia menos confrontativa con el Reino Unido por el tema Malvinas y, de hecho, Milei y Mondino tuvieron una reunión con Cameron semanas atrás, cuando el mandatario y su comitiva viajaron al Foro de Davos, en Suiza.  

A su llegada al archipiélago, Cameron les dijo públicamente a los kelpers que el Reino Unido quiere que las Islas sean británicas "para siempre". Se trata de la primera visita de un funcionario inglés de ese rango a las Malvinas en los últimos 30 años.