El Gobierno repudió "la violencia institucional" de la policía de Formosa en la protesta contra la cuarentena
El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y la Secretaría de Derechos Humanos admitieron que existió "violencia institucional" en el accionar de la policía de Formosa.
El gobierno de Alberto Fernández rechazó hoy el accionar de la policía de la provincia de Formosa en el marco de las protestas contra la vuelta a la Fase 1 de la cuarentena a partir de un rebrote de coronavirus en la capital.
"El Estado debe garantizar la libre expresión pacífica de la ciudadanía. En momentos de angustia colectiva, tiene que primar la serenidad. La violencia nunca es el camino. Y mucho menos la violencia institucional", resaltó el jefe de Gabinete Santiago Cafiero.
El titular de ministros se expresó de esta forma en su cuenta de la red social Twitter, al replicar el mensaje de la Secretaria de Derechos Humanos de la Nación, que también cuestionó la "violencia" de la policía formoseña contra manifestantes.
"La Secretaría de Derechos Humanos de la Nación repudia la violencia ejercida por integrantes de la policía provincial de Formosa sobre los manifestantes que se concentraron en la jornada de hoy frente a la Gobernación", resaltó la oficina que dirige Horacio Pietragalla.
Sin embargo, más allá del cuestionamiento a la policía, la Secretaría de DDHH criticó "la permanente campaña de desprestigio llevada adelante por los medios hegemónicos de comunicación sobre el gobierno provincial" y al "constante boicot a las medidas sanitarias excepcionales para hacer frente a la pandemia".
"El uso político que algunos sectores de la oposición hacen de estos hechos, y la violencia desmedida de algunos manifestantes —que hoy incluso intentaron ingresar a la Casa de Gobierno provincial— no justifican el uso desproporcionado de la fuerza policial en la represión de la protesta", evaluó.
Y agregó: "Las fuerzas de seguridad, tanto las nacionales como las provinciales, deben estar capacitadas para contener actos de violencia, en el contexto de protestas en un marco de pleno respeto de los derechos humanos. Después de los hechos, la Secretaría de Derechos Humanos se mantuvo en comunicación con las autoridades provinciales y con organismos de derechos humanos locales para monitorear la situación de los heridos y los detenidos".