El Gobierno espera que la campaña de vacunación tome impulso antes de fin de mes con llegada de nuevas vacunas
Cumplido el arribo del cuarto cargamento, el país espera tener a disposición las producidas en otros países con los que también llegó a acuerdos y comenzar así a diversificar las dosis con las que cuenta.
El Gobierno espera que la campaña de vacunación contra el coronavirus tome impulso antes de que concluya febrero, tras la llegada del nuevo cargamento de 400 mil dosis de Sputnik V procedente de Moscú y la confirmación de que arribarán las primeras vacunas de AstraZeneca provenientes de la India.
Hasta el momento, llegaron a la Argentina 1.220.000 dosis de la vacuna desarrollada por el Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Nikolay Gamaleya: por problemas en el ritmo de producción, Rusia no pudo cumplir con la cantidad de vacunas prometidas en un primer momento.
Cumplida la llegada del cuarto cargamento de las vacunas rusas, la Argentina ahora espera tener a disposición las producidas en otros países con los que también llegó a acuerdos y comenzar así a diversificar las dosis con las que cuenta, permitiendo acelerar el ritmo de aplicación a la población.
El pasado sábado el Ministerio de Salud informó a las carteras sanitarias de las provincias que para los próximos días se espera el arribo de 580 mil dosis de la Covishield producidas en el Serum Institute de la India. Para marzo se prevé la llegada de otras 580 mil, que integran las 22,4 millones que el Gobierno ya suscribió por contrato con el laboratorio anglosueco. La vacuna Covishield fue autorizada "con carácter de emergencia" esta semana por la ANMAT.
Además, el país ya se aseguró otros 2.2 millones de vacunas de AstraZeneca a través del fondo Covax, el mecanismo multilateral impulsado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para buscar una distribución equitativa de las vacunas en el mundo.
Por otro lado, la gestión de Alberto Fernández también aguarda que para fin de mes arribe el primer lote de un millón de vacunas chinas de Sinopharm, tras una extensa negociación con el gobierno de Xi Jinping, ya que se consideraba algo excesivo el precio de 40 dólares la dosis (más del doble del valor de la Sputnik V).
Esta vacuna, de la cual se recibirán en total 30 millones de dosis, aún no fue aprobada en la Argentina por la ANMAT (desde principios de mes está analizando sus datos), aunque se espera que lo haga oficialmente en los próximos días.
Ante el arribo de más dosis de distintas vacunas, la Casa Rosada espera poder impulsar la campaña de vacunación para pasar a un etapa de inmunización masiva, aunque se priorizarán a los grupos que cuentan con factores de riesgo y de los trabajadores esenciales.
A la vez, el Gobierno busca también aprovisionarse con dosis chinas del laboratorio Sinovac, a través del Instituto Butantan, laboratorio público brasileño del estado de San Pablo.
Esta vacuna es la que adquirió Chile, a través de dos cargamentos de 2 millones de dosis cada uno, mediante la cual se posicionó hasta el momento como el país sudamericano que mayor cantidad de población vacunó.
Por otra parte, ya descartada la adquisición de vacuna de Pfizer por diferencias durante las negociaciones, el Gobierno se encuentra en tratativas con otros dos laboratorios estadounidenses para comprar las vacunas de Moderna y Johnson & Johnson, pero hasta el momento ninguna de las dos se encuentra cerrada, por lo que se desconoce aún cuándo podrían llegar cargamentos con dosis de ambas.