El fiscal de juicio de la Causa Memorando con Irán, Marcelo Colombo, rechazó hoy la recusación planteada en su contra por las querellas de la DAIA y de dos familiares de víctimas del atentado contra la mutual judía AMIA. En una extensa y por momentos áspera audiencia virtual, Colombo refutó los temores de falta de imparcialidad que plantearon los querellantes por haber aceptado una audiencia oral para tratar pedidos de nulidad formulados por Cristina Fernández de Kirchner y Andrés Larroque.

La vicepresidenta y el ministro bonaerense, ambos procesados en la causa que se inició por denuncia del difunto fiscal Alberto Nisman, pidieron la nulidad de la reapertura del expediente porque esa decisión fue adoptada por los jueces Gustavo Hornos y Mariano Borinsky.

Ambos aparecen en los listados de visitas al ex presidente Mauricio Macri en fechas concomitantes con la decisión de aceptar a la DAIA como querellante y, a través de ello, reactivar un expediente que había sido archivado en dos oportunidades.

Los querellantes,  el titular de la DAIA,  Jorge Knoblovits, y los particulares Luis Czyzewski y Mario Averbuch, plantearon a través del abogado Tomás Farini Duggan que la audiencia convocada pero aún sin fecha no está prevista en el Código Procesal.

Además, sugirieron que el fiscal Colombo cambió de actitud respecto de la causa, puesto que en febrero de 2020 impulsaba la rápida realización del juicio oral “y ahora acepta una audiencia dilatoria”. Incluso deslizaron que pudo haber tenido reuniones “próximas” a la Procuración del Tesoro, cuyo titular, Carlos Zanini, es uno de los imputados en la causa.

Colombo replicó que la audiencia en la que se tratará el planteo de nulidad es un paso procesal previsto en el ordenamiento y proclamó que el carácter público garantizará la “transparencia” de las decisiones que se adopten. Además, refutó las sospechas de parcialidad y desafió a las querellas a que demuestren sobre qué basaban esas hipótesis.

El tribunal oral federal número ocho, integrado por los jueces Gabriela López Iñíguez, Daniel Obligado y José Antonio Michilini, tomará ahora una decisión sobre la recusación del fiscal y la comunicará a las partes mediante una cédula de notificación. El tribunal oral también está recusado por los mismos querellantes, y esa decisión está ahora en manos de la Sala Primera de la Cámara Federal de Casación Penal.