Los "estrictos" controles anunciados por el Gobierno nacional y respaldados por Ciudad y Provincia se diluyeron con la lluvia que cayó sobre el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), aunque con el correr de las horas se profundizaron los chequeos de los vehículos para corroborar que viajaran trabajadores esenciales.

Pese a que en el primer día de confinamiento sí había presencia de uniformados en los principales puntos de circulación de la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano, los autos particulares y colectivos transitaban sin inconvenientes, ante la ausencia de controles, algo que cambió con el correr de las horas.

"Son controles de adaptación", aclaró el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, respecto de esta situación, en declaraciones radiales.

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Las imágenes en Puente Pueyrredón y Acceso Oeste, entre otros, mostraban tránsito fluido y el rol policial se limitaba a colocar los conos naranjas y blancos, que obligaban a los conductores a disminuir la velocidad.

En otro punto, como el peaje de Hudson, en la autopista Buenos Aires-La Plata, sí se observaban chequeos a los automovilistas.

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En la Casa Rosada, el pasado viernes las autoridades de las tres jurisdicciones habían acordado realizar "controles estrictos" para dar cumplimiento al "cierre duro" anunciado por el presidente Alberto Fernández, para lo cual se habló de "intensificar" la presencia policial en accesos y rutas del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).

"Se controlarán especialmente las rutas bonaerenses porque el turismo está prohibido, con fuerte presencia de Seguridad en el peaje de Hudson básicamente", señalaron las fuentes consultadas. 

A la vez, se estableció que los trabajadores esenciales conservarán sus permisos de circulación, mientras que los del resto serán dados de baja, así como se ratificó que se suspende la posibilidad de hacer turismo: para ello se hicieron caer las autorizaciones de viajes y habrá "estrictos controles interjurisdiccionales".

También se remarcó que los empleados o dueños de comercios de Ciudad que vivan en Provincia no tendrán habilitación para ingresar a Ciudad: "Quienes trabajan en sector no esencial no van a poder cruzar de Provincia a Ciudad. Van a caer los permisos de los no esenciales y va a haber un control firme de los códigos QR", explicó la ministra de Seguridad, Sabina Frederic.

"Se acordó poder invertir los esfuerzos necesarios para evitar la circulación interjurisdiccional entre la Ciudad y la Provincia", manifestó.

Al analizar el comienzo del confinamiento estricto, el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, afirmó que este fin de semana se van a realizar "controles de adaptación", aunque destacó que notaba "gran responsabilidad en el cumplimiento de la circulación".

"Son controles de adaptación. La gente en un par de horas no puede cambiar el sistema perfecto de autorización. Hay una gran responsabilidad en el cumplimiento de la circulación. Vemos que hay muy poco tránsito circulando", señaló el funcionario provincial en declaraciones radiales, aunque reconoció que "hay condiciones meteorológicas que ayudan".

Y agregó: "En el transcurso de las horas, en la medida en que la aplicación empiece a generar las autorizaciones, los controles van a ser extremadamente estrictos y los que no tengan la autorización van a quedar a disposición del fiscal".

En lo que se refiere a los accesos a la Ciudad de Buenos Aires, de los 127 cruces 71 permanecerán cerrados hasta el lunes 31 de mayo: de los 56 que estarán habilitados, 50 estarán bajo control de la Policía de la Ciudad y los otros seis serán custodiados por Prefectura y la Policía Federal.