Después de casi dos meses, la Cámara de Diputados volverá a sesionar hoy en torno a temas de consenso entre el oficialismo y la oposición, entre los cuales sobresale el proyecto que busca retrasar las fechas de las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) y de las elecciones generales.

La sesión, convocada para las 14:00, había sido acordada entre el oficialismo y la oposición días atrás, pero la avanzada del Gobierno con la presentación del proyecto de reforma del Ministerio Público Fiscal (MPF) crispó el estado de ánimo de Juntos por el Cambio.

Sin dudas, el tratamiento de un tema tan álgido como el del MPF, que toca una fibra sensible del ideario de Juntos por el Cambio en materia de "defensa de las instituciones" y la "división de poderes", hará que se llegue a la sesión en un marco de extrema tensión política.

Con este mar de fondo, es de esperar una catarata de cuestiones de privilegio invocadas por diputados opositores para protestar por lo que consideran un avasallamiento de la República, y también para volver a la carga con las críticas por la campaña de vacunación.

Luego de ese prólogo, que podría consumir varias horas de sesión (se acordará previamente en la comisión de Labor Parlamentaria convocada a las 11:30), se levantará el telón para dar comienzo a la función principal, con el tratamiento de los proyectos de agenda.

El plato fuerte de la sesión será la votación de la iniciativa que reformula el calendario electoral y posterga las PASO al 12 de septiembre, en lugar de la fecha original del 8 de agosto.

También se prevé correr la fecha de las elecciones generales del 24 de octubre, como marca el calendario vigente, al 14 de noviembre.

El objetivo de la reprogramación del cronograma electoral es evitar los meses más fríos del año y que hacia septiembre, con la normalización de la llegada de vacunas que se espera a partir de fines de este mes, ya haya un avance significativo en la cantidad de personas vacunadas.

En segundo lugar -y para completar el paquete de proyectos de índole electoral, se someterá a tratamiento en el recinto la ley de caducidad de partidos políticos.

Este proyecto apunta a suspender hasta el 31 de diciembre de este año dos causales de caducidad de los partidos políticos, para que todas las fuerzas queden habilitadas a participar este año del proceso electoral, aunque no hubieran cumplido con los requisitos legales para hacerlo.

La iniciativa busca garantizar que los partidos políticos puedan participar de los comicios aún sin haber podido celebrar elecciones internas de renovación de autoridades, o pese a no contar con el mínimo de afiliaciones, producto de la pandemia de coronavirus.
.
Temario cargado: se sumó el Consenso Fiscal.
.
El orden del día de la sesión seguirá con la votación de la iniciativa que impulsa Eduardo "Bali" Bucca para crear un Sistema Nacional de Bomberos Voluntarios.

El segundo proyecto de relevancia que ingresó al temario es el de Consenso Fiscal, que por tratarse de temas de reparto de fondos hacia la provincias y la Ciudad siempre genera alguna chispa de controversia.

La iniciativa firmada entre el presidente Alberto Fernández y los gobernadores, que ya tiene media sanción del Senado, otorga 70.000 millones de pesos a las provincias para reactivar sus economías, a la vez que prohíbe el aumento de la deuda pública, y suspende procesos judiciales por el reparto de la Coparticipación Federal.

En el Senado, el proyecto no tuvo el apoyo de Juntos por el Cambio, por lo que es esperable un resultado similar en la Cámara baja.

La agenda económica estará muy presente en el temario de la sesión: además de Consenso Fiscal, se votará el proyecto que modifica el impuesto a las Ganancias para empresas.

La norma propuesta establece nuevas alícuotas marginales escalonadas con tres segmentos en función del nivel de ganancia neta imponible acumulada.

Para una ganancia imponible de hasta $5.000.000, se propone que las empresas paguen una alícuota del 25%; entre $5.000.000 y $20.000.000, un 30%; y finalmente, sobre ganancias superiores a $20.000.000, un 35%.

Este esquema significa que habrá un aumento de la presión tributaria exclusivamente en el segmento de empresas con mayores ganancias declaradas en tanto que habrá una baja de la carga impositiva para 9 de cada 10 empresas.

La Cámara de Diputados no sesiona desde el sábado 27 de marzo, cuando se trataron los proyectos de impuesto a las Ganancias y los cambios al régimen de monotributo, entre otras iniciativas.