Por Antonio D'Eramo

Los giros de la Nación a la provincia de La Rioja administrada por Ricardo Quintela son millonarios pero nadie puede asegurar con precisión como se gastan o utilizan.

Auditar o preguntar no son opciones porque el gobernador riojano controla, de manera implacable, la comunicación oficial, a la Justicia que se encuentra desprestigiada y manejada por la sobrina de Quintela y a la Legislatura local, poblada de partidarios del gobernador.

Fuentes gubernamentales explicaron a NA que el presidente Alberto Fernández “está molesto porque Quintela no presenta ni un solo ticket fiscal que justifique adónde van los millonarios fondos que la Nación gira a varias provincias en particular a la provincia de La Rioja”.

 La Rioja tuvo un aumento del 101% en materia de recursos por coparticipación federal en enero sin computar la inflación. Al considerarla, el incremento fue del 1,7%.

La Rioja y Catamarca son las provincias con mayor incremento interanual nominal de fondos coparticipables, según un informe de la consultora Politikon Chaco.

 “Al puntualizar los fondos nacionales, la Provincia recibió $14.166 millones por coparticipación federal de impuestos en el primer mes del año más $277 millones por recursos extras denominados como transferencias no automáticas”, explicaron fuentes periodísticas locales.

Pero el dato más significativo del primer mes del año en curso es la cantidad de dinero que debería recibir cada riojano por las transferencias que llegan de la Capital.

Al analizar la llegada de fondos coparticipables, cada riojano recibió $36.834 en enero, según el equipo de Politikon Chaco.

Los informes oficiales indican que La Rioja entre otras provincias como Catamarca, La Pampa, Santa Cruz y Chaco recibieron un equivalente de entre $ 30.000 y $ 37.000 por habitante durante enero. Mientras que en el otro extremo se ubican Tucumán, Salta, Chubut, Misiones, Santa Fe, Neuquén, Córdoba y Mendoza recibieron entre $ 14.000 y $ 19.900 por habitante, y la provincia de Buenos Aires y la CABA captaron menos de $ 10.000 por persona.

Dirigentes de la oposición de Juntos por el Cambio como el ex ministro de Defensa, el radical Julio Martínez, explican que muy probablemente los fondos que recibe la provincia, de los que casi ninguno se audita, se encuentran invertidos en la gran cantidad de empresas estatales creadas por Quintela y dirigidas por sus amigos y familiares.

“Quintela generó un símil del estado soviético en nuestro país. Se puso a crear empresas estatales, que fracasaron en el mundo y no sólo en la Argentina, por corrupción, ineficiencia e inoperancia. Un ejemplo es Rioja Bus, una compañía estatal creada para ayudar a dos empresas privadas de Chilecito y la Capital que pierden 200 millones de pesos por mes y compraron unidades sin licitación alguna. De igual manera en vez de buscar una empresa de aviación low cost para operar puso en marcha Alas Riojanas, que con dos vuelos semanales a Buenos Aires ya pierde 60 millones de pesos mensuales”.

El sector privado, que no se somete a los designios del gobernador, es mala palabra en la provincia de La Rioja. El combate a la iniciativa privada se observa en la creación de 40 empresas estatales, agrupadas bajo el slogan “Mejor riojanas”, que fabrican alimentos, asfalto, cristales, ofrecen servicios de internet, logístico y hasta un supermercado para competir en precio con las grandes cadenas privadas.

Esta intromisión del Estado en casi todas las actividades económicas que puedan realizarse impacta en los recursos tributarios en los que se anota una dependencia del dinero de origen nacional. En ese sentido La Rioja obtiene recursos en un 90% por los fondos que gira Nación.

Y, respecto al empleo, la provincia se encuentra en el lote de jurisdicciones provinciales donde hay más trabajadores públicos que privados.

Desde luego, que el sector privado no tiene chance alguna de competirle a las empresas estatales creadas por la gestión de Quintela, a pesar de los déficits millonarios que ocasionan.

Ahora bien, el gobernador riojano mostró astucia y se curó en salud. Porque, a pesar de las sospechas de desvíos de fondos y de la poca explicación existente acerca de la deriva de los millonarios recursos recibidos, no prosperan ningún pedido de aclaración ni tampoco ninguna demanda que pudiera llevarse adelante porque el Poder Judicial riojano está casi totalmente cooptado por la facción de Ricardo Quintela.

La designación, en abril pasado, de Karina Becerra -sobrina de Quintela- en el Superior Tribunal de la provincia es la muestra más cabal de nepotismo.

Según fuentes provinciales Quintela habría designado un mínimo de 30 familiares en puestos estatales, inclusive en poderes del Estado que no le deberían responder, como el judicial.

La presidenta del Colegio Público de Abogados, Jazmín Jarquis, en diálogo con La Nación, afirmó que “Hay pocos concursos, un uso abusivo de la figura del juez transitorio y designaciones sin credenciales académicas suficientes. Ese esquema favorece que puedan entrar por la ventana jueces amigos. Los sueldos más bajos del país también contribuyen al desprestigio que se vive”.

Un foto que indigna

“En el contexto actual y por su densidad poblacional, La Rioja, debería ser la Qatar de la Argentina. Porque junto a la provincia de Catamarca son dos de los estados más beneficiados por la administración de Alberto Fernández sin embargo hay pibes que comen poco y familias que mangan al gobernador Quintela 2.000 pesos para llegar a fin de mes”, sintetizó un periodista local para dar cuenta de la situación.

La alusión del colega riojano se debe a la foto publicada en La Nación donde se muestra al gobernador del Frente de Todos, Ricardo Quintela, haciendo muestra explícita de clientelismo político. Una actitud desvengorzada y decadente de un mandatario provincial que “se cree Facundo Quiroga” y cuyas actitudes generan “bronca e impotencia” según expresó el diputado nacional riojano Felipe Álvarez.

Crece la preocupación por los fondos nacionales que recibe La Rioja y lo incierto de su destino
Foto de Sebastián Salguero - La Nación

“Nos genera mucha bronca e impotencia por nuestra provincia. Es indignante y nos avergüenza saber que este tipo de noticias son las que llegan a Buenos Aires. Es una costumbre que indigna. Porque el gobernador estaba haciendo una nota con un medio nacional y mientras recorría con su camioneta la gente le pidió plata y él entregó. Esa imagen duele porque muchos riojanos son rehenes de la pobreza y el clientelismo”, explico el legislador.

Ahora bien, es una anécdota registrada fotográficamente, pero es tan sólo una muestra más de la costumbre de Quintela de responder con fondos públicos ante las demandas y necesidades de la población que debe rebajarse a pedir dinero a un político que se los otorga subido en una 4x4 que tiene un valor enorme.