Luego del acuerdo alcanzado con Juntos por el Cambio, el oficialismo buscará este jueves dictaminar el proyecto que reformula el calendario electoral y, entre otros aspectos, pospone las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) al 12 de septiembre y las elecciones generales al 14 de noviembre.

Los diputados de la comisión de Asuntos Constitucionales se encontrarán a las 17:00 para debatir los pormenores del proyecto y sobre el final de la reunión se pasará a la firma del dictamen.

Juntos por el Cambio condicionó su apoyo a que se incluyera en la redacción del proyecto una "cláusula cerrojo" que dejara bien explicitado que no habrá una nueva modificación al calendario electoral de este año. 

Esta exigencia fue atendida por el Gobierno e incorporada a la letra del proyecto, que también establece que el cambio de las fechas para las elecciones primarias y para las generales será "por única vez", así como la modificación de los plazos previstos para el registro de los candidatos y la oficialización de listas.

El objetivo de la reprogramación del cronograma electoral es evitar los meses más fríos del año y dar más margen de tiempo para llegar a las PASO con la mayor cantidad de población vacunada posible.

El texto, que ya fue acordado con la oposición, tiene las firmas del jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y el ministro del Interior, Eduardo "Wado" De Pedro.

Distintas voces del oficialismo, especialmente de gobernadores que encontraban eco en funcionarios del Gabinete nacional, promovían directamente la suspensión de las PASO, pero finalmente tuvieron que conformarse con un esquema de postergación de las fechas, debido a la resistencia férrea que opuso Juntos por el Cambio.

Después de muchos idas y vueltas, la puntada final del acuerdo tuvo lugar días atrás durante la reunión que mantuvieron el ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro,
el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, y los jefes de la oposición parlamentaria, quienes participaron vía Zoom del encuentro celebrado en el Salón de los Escudos de la cartera de Interior.

Antes de eso, el propio De Pedro había dado arrojado señales confusas ya que tras un principio de acuerdo alcanzado con la oposición, demoró el envío de un proyecto propio del Poder Ejecutivo y luego alentó a que fueran los diputados quienes debatieran iniciativas propias, sin intervención del Gobierno nacional.

Tras varios días de incertidumbre y desconfianza mutua entre oficialismo y oposición, se retomaron las gestiones a través de contactos telefónicos informales que volvieron a encarrilar el acuerdo.

En los fundamentos del proyecto, se señala que "desarrollar los comicios requiere de la movilización y participación de personas y, como lo demuestra la evidencia científica, en la medida en que el virus se propaga a través del contacto entre individuos, los Estados se han visto en la necesidad de adaptar sus procedimientos para proteger la salud pública y la de sus ciudadanos, garantizando a su vez, la plena vigencia de los derechos políticos".

En el texto se menciona que "desde el inicio de la pandemia, se han celebrado ochenta y ocho elecciones nacionales", pese a lo cual "en muchos casos, la fecha de comicios debió
modificarse para evitar que coincidan con un momento de crecimiento de los contagios".

En este sentido, se citó el caso de Chile, que "pospuso el referéndum constitucional de abril a octubre de 2020 y las elecciones de constituyentes, concejales, alcaldes y gobernadores que debían realizarse en abril de este año".

"También Bolivia y Polonia debieron postergar sus elecciones presidenciales y Brasil, una elección de senador. En los Estados Unidos se cambió la fecha de varias elecciones primarias", indica el proyecto.

"Nos encontramos en un contexto de excepción y, en ese marco, en el imperioso desafío de garantizar el pleno ejercicio de los derechos políticos individuales y colectivos propios de nuestro sistema democrático. Ello nos impulsa a establecer las medidas que la situación epidemiológica nos impone para evitar una mayor propagación del virus, sin trastocar las reglas y fundamentos de nuestro régimen electoral", expresa el texto.

Por lo expuesto, la propuesta afirma que "se propicia efectuar las adecuaciones operativas y legales que permitan llevar adelante los comicios de una manera sanitariamente
responsable, garantizando el derecho de los ciudadanos y las ciudadanas a votar y el de las agrupaciones políticas y sus candidatos y candidatas a participar en igualdad de
condiciones".

"En concreto, con el fin de preservar la plena vigencia de las leyes electorales y, al mismo tiempo, evitar el riesgo asociado a convocar una elección nacional en el mismo
momento en que se podría esperar que el sistema de salud se encuentre exigido por las enfermedades invernales y la segunda ola de COVID-19, proponemos posponer la fecha de las elecciones P.A.S.O. y las generales para el segundo domingo de septiembre y el segundo domingo de noviembre del corriente año, respectivamente", concluye el proyecto.