El acuerdo que cerraron el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el titular del PRO bonaerense, Jorge Macri, sirvió para empezar a ordenar la interna del partido amarillo con la UCR, pero de cara al cierre de las listas en ambos sectores siguen conversando sobre el reparto de lugares.

Tras los primeros acuerdos, el escenario de las primarias (PASO) en la provincia de Buenos Aires quedó planteado como una competencia entre tres listas: la del PRO, encabezada por Diego Santilli y apoyada por Larreta; la de la UCR, liderada por Facundo Manes, y la segunda opción radical que encabeza Gustavo Posse.

No obstante, las candidaturas deberán presentarse ante la Justicia Electoral de aquí al 24 de julio, por lo que dentro de cada partido continúan las negociaciones para establecer cómo quedará integrada cada lista, especialmente en los llamados "lugares entrables".

Fuentes del PRO confirmaron a NA que Santilli y Rodríguez Larreta le ofrecieron a Jorge Macri el tercer lugar de esa boleta, pero el intendente de Vicente López todavía no confirmó si lo aceptará.

Si bien "hubo otros ofrecimientos" para el presidente del PRO bonaerense ninguno fue aceptado y, hasta el momento, el acuerdo pasa por la incidencia que tendrá en el armado de las listas de candidatos a diputados provinciales, donde le prometieron los principales lugares para su gente.

Las negociaciones del radicalismo son más complejas, dado que Manes empezó a cerrar acuerdos con dirigentes extra partidarios como Margarita Stolbizer y Emilio Monzó, contrariamente a lo que pretende el partido, esto es, una lista radical pura.

La UCR arriesga en este turno electoral las bancas de Carlos Fernández, Josefina Mendoza y Fabio Quetglas, pero si los primeros lugares de la lista de Manes son ocupados por extra partidarios el radicalismo podría perder esos escaños en el Congreso.

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Esto se debe a que las PASO determinarán cómo quedará integrada la lista final en función de la cantidad de votos que cosechen Manes, Santilli y Posse, por lo que los candidatos "puros" del radicalismo podrían ubicarse muy abajo si los lugares "entrables" de la nómina para las primarias son ocupados por dirigentes de otros partidos.

Por esa razón, la conducción provincial de la UCR mantiene abiertas las negociaciones y está en duda que Monzó vaya a ocupar el tercer lugar de la lista como se prevé hasta el momento, según indicaron fuentes del partido a NA.

La otra conversación que quedó "abierta" es la que apunta a la situación de Posse, dado que el intendente de San Isidro mantiene hasta el momento su decisión de llevar una lista propia con dirigentes radicales alineados con su figura.

El jefe comunal y referente de la UCR bonaerense perdió en el último tiempo el apoyo que tenía por parte del senador Martín Lousteau, quien vio con buenos ojos el lanzamiento de Manes y la decisión de la UCR de pelearle las listas del PRO.

Lousteau prefiere que haya una sola lista radical en la Provincia, según contaron a Noticias Argentinas en su entorno, pero hasta el momento no logró convencer a Posse de declinar su candidatura.

En este sentido, cerca del intendente de San Isidro señalaron a NA que, si bien avanzan con la conformación de una lista propia, mantienen "conversaciones con todos" y deslizaron que "todo puede cambiar el último día".

De esta manera, Juntos por el Cambio mantuvo la unidad de todos los actores dentro de la alianza -que ahora se llamará simplemente "Juntos"- pero la conformación final de cada lista, así como la cantidad de boletas que competirán en las PASO no está todavía definida.