Tras anunciar su apoyo al candidato de Unión por la Patria, Sergio Massa, de cara al balotaje del 19 de noviembre, el senador nacional de Unidad Federal Carlos "Camau" Espínola sostuvo que quien gane las elecciones debe "convocar a todos los ex presidentes" sin importar el partido político, desde Cristina Kirchner y Alberto Fernández hasta Mauricio Macri.

En el caso de que el jefe de Estado del próximo ciclo de cuatro años sea el actual ministro de Economía, aseguró que la característica preponderante de su gestión será "la amplitud" en la convocatoria a los distintos sectores sociales y políticos en el marco de "un modelo de unidad nacional" que deje atrás la grieta.

En ese sentido, el ex intendente correntino señaló que ve a la vicepresidenta Cristina Kirchner "muy corrida" del esquema que tendría un eventual Gobierno de Massa, el cual irá de la mano de una "nueva generación" de gobernadores que salieron triunfantes en las urnas y que comparten la vocación por "dar vuelta la página" de la grieta.

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"La veo a la vicepresidente muy corrida. Ella lo ha expresado. Pero también creo que a quien le toque ser presidente debe convocar a todos los ex presidentes, de un partido o de otro. Debemos recuperar el respeto por la institucionalidad de aquellos que fueron presidentes, con sus errores y aciertos", afirmó en una entrevista con Noticias Argentinas. 

Sobre la convocatoria a un gobierno de unidad nacional, Espínola subrayó que no se reduce al radicalismo sino que también abarca, por ejemplo, a sectores del PRO que "no son 'halcones' y defienden la racionalidad".

"Si hay algo que tengo es diálogo con muchos sectores que entienden que Argentina no tiene que ir a los extremos. No quiero decir nombres porque tengo conversaciones con muchos dirigentes de forma privada, soy prudente, pero los hay", dijo sin revelar el enigma.

Consultado sobre el tipo de liderazgo que ejerció el jefe de Estado Alberto Fernández durante estos cuatro años, el legislador peronista cuestionó que  el mandatario "no tuvo en esta etapa la decisión de terminar con la grieta". 

"Hubo momentos donde Alberto ha tenido un rol importante y momentos donde ha tenido una ausencia conduciendo el país", agregó al respecto. 

Espínola confía en que Massa, en caso de ser Presidente, logre construir un Gobierno de unidad nacional. Foto: NA/Damián Dopacio.

Por otra parte, Espínola se refirió a su pertenencia a la bancada de Unidad Federal en el Senado y descartó que por el momento vaya a unirse a Unión por la Patria, más allá de su respaldo a Massa rumbo a la segunda vuelta frente al candidato de La Libertad Avanza Javier Milei.

"Tenemos el bloque junto a Alejandra Vigo y Edgardo Kueider y la idea es sostenerlo, siempre con voluntad constructiva", aclaró a NA. A continuación, un resumen de la charla con esta agencia:

NA - ¿Cómo madura la decisión de darle el respaldo a Massa en el balotaje?

CE - Hay determinado momento donde uno tiene que tomar una posición. Una cosa fueron las PASO y las generales, pero una vez resuelto, quedan dos opciones. En estas dos opciones tengo claro dónde me quiero parar que es la convocatoria a lo constructivo y no del lado de Milei donde veo una posición mucho más destructiva, de poca convocatoria. ¿Cómo surgió mi apoyo? Yo tengo una relación con Sergio. Le mandé un mensaje de felicitaciones cuando ganó y nos juntamos. Estoy de acuerdo con la idea de un Gobierno de unidad nacional.

Hasta ahora ningún dirigente opositor se sumó a la convocatoria del Gobierno de unidad nacional. ¿Se puede llevar a la práctica esa propuesta o es voluntarista?

- Hay un proceso electoral en curso. El radicalismo reaccionó frente a los agravios que Milei ha realizado contra el partido y contra Raúl Alfonsín. La unidad nacional es el único camino que tenemos como país y todos tenemos que hacer el esfuerzo para que suceda. 

¿El llamado de la unidad nacional apunta solamente al radicalismo?

- Apunta a todos los sectores. Te puedo garantizar que dentro del PRO hay sectores que no son halcones y defienden la racionalidad. Si hay algo que tengo es diálogo con muchos sectores que entienden que Argentina no tiene que ir a los extremos. No quiero decir nombres porque tengo conversaciones con muchos dirigentes de forma privada, soy prudente, pero los hay. Dentro del radicalismo y otros partidos debe estar la voluntad de ordenar la Argentina. Si uno mira cómo se dieron los resultados de las elecciones provinciales y los nuevos gobernadores que surgieron, es claro que hay una nueva generación que va a gobernar y que viene marcando junto a la sociedad un reclamo de reordenamiento y vuelta de página para construir un país distinto.  

- ¿Vuelta de página a qué?

- A la grieta. No podemos es seguir profundizando la grieta, seguir dividiendo a los argentinos. Hay que lograr un gran esfuerzo para que se termine porque es el único camino para salir adelante. La grieta es cuando el fanatismo lleva a no poder hablar. Van a quedar fanatismos de los extremos, pero tenemos que buscar que la mayoría entienda que no sirve. Hoy hay 50 por ciento de un lado y 50 por ciento del otro. Lo que hay que hacer es que tengamos un 85 por ciento en el medio discutiendo la Argentina y que los extremos sean cada vez menores. 

- ¿La grieta es responsabilidad del gobierno del Frente de Todos?

- En parte se debe al Gobierno de Macri, también al proceso del kirchnerismo y al Gobierno de Alberto Fernández que no tuvo en esta etapa la decisión de terminar con la grieta. Ese proceso hace que hoy haya una situación económica compleja y poca previsibilidad. Si bien la economía tiene altas dificultades, Massa tiene experiencia y está tomando decisiones para poder ordenarla, a pesar de que no es presidente. Por el otro lado veo a un Milei que usa a la motosierra como algo simpático pero así no se construye un país y un Estado. 

- ¿Cuál es el balance que hace de los cuatro años de gestión de Alberto Fernández?

- Hubo momentos donde Alberto ha tenido un rol importante y momentos donde ha tenido una ausencia conduciendo el país. La vuelta de pagina que necesitamos tiene que ver con no repetir esos errores y dejar atrás la grieta, convocando a todos los sectores.

- En los últimos 20 años el peronismo estuvo muy marcado por el kirchnerismo. ¿Se viene un nuevo peronismo con Massa?

- Estoy convencido de que Massa va a buscar la amplitud y un modelo de unidad nacional. Lo tiene que hacer porque sino va a terminar en un fracaso y no hay margen para otro fracaso. 

- ¿Qué rol debería jugar el kirchnerismo en general y Cristina en particular en el tiempo que viene?


- La veo a la vicepresidente muy corrida. Ella lo ha expresado. Pero también creo que a quien le toque ser presidente debe convocar a todos los ex presidentes, de un partido o de otro. Debemos recuperar el respeto por la institucionalidad de aquellos que fueron presidentes, que fueron elegidos y que tuvieron un rol, con sus errores y aciertos. Lo que debemos buscar es cuáles fueron los aciertos para seguir construyendo un país mejor. Espero que el rol (de Massa) sera convocar y hablar con cada uno.

- En esa nómina deberían estar Alberto Fernández, Cristina Kirchner...

- Y el mismo Mauricio Macri. Todos los que hayan sido presidentes de la Argentina deben tratar de encontrar una salida, para construir un país mejor.

- ¿Qué país se imagina con Massa y qué país con Milei?

- Con Massa me imagino unidad nacional, convocando a todos y recuperando la economía. Massa conduciendo, tomando decisiones, volviendo a recuperar incentivos para los sectores productivos. Del otro lado, es una incógnita y si me guío por las expresiones siento que va camino a destruir todo. De un lado veo mucha más capacidad de poder ordenar, y del otro lado veo un desorden total. Lo de Milei es una expresión de enojo, ahora ojo que eso no es gobernar. 

- ¿Qué es lo que Milei viene a destruir?

- Cuando le preguntan si cree en la democracia, siempre la esquiva. Él no cree en el Estado. ¿Vamos a volver a una apertura comercial indiscriminada sin protección a la industria? El tema de la dolarización, sabemos que son temas que no van a funcionar. Una cosa es el enojo y otro cosa es decidir si está en condiciones de gobernar el país. No va terminar con la grieta, al contrario.

- ¿Cómo se explica que la mejor opción que tiene para mostrar el oficialismo como candidato sea su ministro de Economía, con los actuales niveles de inflación?

- Está claro que la economía es uno de los factores que animan el voto. Sergio es el único que puede resolver la economía. Asumió como ministro en un contexto de mucha complejidad, le puso el pecho y lo ha podido sostener. Por otro lado, la oposición tenía una oportunidad de llevarle tranquilidad a la sociedad y se terminaron peleando entre ellos. Tuvieron una interna feroz en la que no cerraron las heridas. 

- Al ver los resultados de las elecciones generales, con Juntos por el Cambio fuera del balotaje, Macri salió al rescate de La Libertad Avanza. ¿Quién va a gobernar si gana Milei?

- Argentina necesita un presidente que conduzca y cuando eso se encamina las cosas se van resolviendo. Veo mucha dificultad en ese sector porque hay divisiones, egos, con un ex presidente con un rol muy activo y un candidato a presidente que debe demostrar su capacidad de gobernar. Veo una dificultad de gobernabilidad y muchas diferencias en la mirada que ha planteado cada uno de esos sectores en las elecciones generales. No sé cómo eso se va a terminar sintetizando. 

- ¿Qué opina sobre el pedido de Patricia Bullrich para que la economía explote antes del balotaje?

- Eso es querer romper todo. Cómo no se ven como favoritos de cara al balotaje, buscan que reviente todo. Eso me da bronca. No me parece saludable.

- Junto a un grupo de senadores peronistas, usted abandonó meses atrás el interbloque oficialista y se integró a una nueva bancada. Si Massa gana, ¿qué van a hacer?

- Nosotros armamos un bloque este año porque consideramos que era un momento para marcar las diferencias dado que veíamos que no se atendían las necesidades de nuestras provincias. Reclamábamos un mirada más federal. Tenemos el bloque junto a Alejandra Vigo y Edgardo Kueider y la idea es sostenerlo, siempre con voluntad constructiva. No es algo que yo haya hablado con Sergio cuando anuncié mi apoyo.