El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, explicó hoy las razones por las cuales no se pudo cerrar contrato con Pfizer para la adquisición de vacunas contra el Covid-19 y al respecto precisó que ese laboratorio "exigió condiciones que no se amoldaban a la ley" que el Congreso había votado en noviembre del año pasado.

El funcionario precisó que esa ley que fue votada con acuerdo transversal de todas las fuerzas "marcaba parámetros contractuales" que incluían la palabra "negligencia", lo cual no fue aceptado por Pfizer, a diferencia de otros laboratorios con los que "se pudo avanzar" porque se atuvieron a esas condiciones.

"El Gobierno nacional es soberano, nosotros tenemos por delante toda nuestra tarea de gestionar vacunas que no depende de un solo laboratorio", resaltó Cafiero en un comunicado.

Además, el funcionario nacional aclaró que "la palabra negligencia fue siempre una dificultad para avanzar con Pfizer, pero nunca se cerró la puerta a la negociación".

Por otra parte, Cafiero sostuvo que "es mentira que había 13 millones de vacunas para traer a la Argentina, ni de Pfizer ni de ningún laboratorio" y agregó: "Firmar contratos es muy fácil, pero que te lleguen es distinto".

Efectivamente, hacia noviembre del año pasado, el Gobierno ya tenía encaminado el acuerdo con Pfizer pero estaba supeditado a la regulación que iba a establecer el Congreso por ley para la compra y provisión de las vacunas.

A pedido de Pfizer, se había establecido una cláusula que establecía condiciones de indemnidad patrimonial respecto de indemnizaciones y otras reclamaciones pecuniarias, pero en Diputados se le hizo un agregado a la letra del proyecto que cayó mal en el laboratorio norteamericano, ya que se fijó "la excepción de aquellas originadas en maniobras fraudulentas, conductas maliciosas o negligencia".

Según relató el martes el ex ministro de Salud, Ginés González García, la secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra, y él en persona intervinieron hasta último momento para intentar salvar el proyecto y el acuerdo, pero fracasaron debido a la intransigencia de Pfizer, que no cedió, así como tampoco Diputados aceptó modificar la ley.