AFIP: Empresa que recibió un plan de pagos especial de Echegaray pide sobreseimiento
Se trata de Súper S.A., una avícola con sede en Entre Ríos que reclamó un plan de pagos por dificultades económicas entre 2011 y 2013. Aseguró que el otorgamiento fue "genuino y transparente".
Una empresa avícola supuestamente beneficiada de manera irregular por la AFIP durante la gestión de Ricardo Echegaray acreditó que cumplió con el plan de pagos acordado, explicó que lo solicitó por una situación de crisis económica y pidió su sobreseimiento.
“La empresa ha dado regular e íntegro cumplimiento al plan de pagos que, a la luz de la Ley de Procedimiento Tributario, oportunamente le concedió la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), encontrándose a la fecha cancelado”, explicaron los abogados de la empresa Súper S.A. sociedad uruguayense de productores de Entre Ríos.
El escrito fue presentado en el marco de la causa caratulada “Echegaray, Ricardo Daniel y otros s/infracción ley 24.769”, que establece el Régimen Penal Tributario.
La empresa explicó “el contexto que afrontaba al momento de solicitar la adhesión al plan de pagos y los motivos que evidencian que dicha solicitud -y su posterior concesión- fue completamente genuina y transparente, basada en una situación de crisis de la empresa (y de la rama completa de su industria)”.
El documento descarta “todo tipo de especulación financiera” y asegura que “no existió irregularidad alguna de parte de SUPER S.A. y que, en consecuencia, el dictado de un auto de sobreseimiento en favor de sus autoridades deviene ajustado a derecho”.
“Súper S.A. desarrolla la actividad avícola en la provincia de Entre Ríos desde hace más de 50 años, habiendo atravesado en muchas ocasiones durante ese transcurso por situaciones de crisis que afectaron la actividad, las que afortunadamente supo sortear de manera exitosa con mucho esfuerzo”, describe el documento.
“Se trata de una empresa que brinda ocupación directa a más de 500 personas, e indirectamente a otras tantas prestadoras de servicios (integrados, fleteros, talleres y comercios en general) no habiéndose producido despidos a pesar de las dificultades por las que hubo que transitar, fieles a la filosofía de respetar las fuentes de trabajo”, añadió.
La situación de crisis a la que aludió la empresa se produjo “desde el año 2011 hasta finales del año 2013, momento en que, justamente, se solicitó a la AFIP la concesión del plan de pagos”.
“Al no ser una empresa formadora de precios, en los años previos a su solicitud del plan de pagos que aquí interesa Súper S.A. se vio obligada a comercializar sus productos a precios de quebranto, consumiendo reservas y generando pasivos comerciales, bancarios e impositivos”, explica el pedido de sobreseimiento.
“Dicha situación de quebranto, debe destacarse, fue motivada en circunstancias ajenas a la empresa, en especial por la caída de importantes volúmenes de exportación que las más importantes empresas del sector abastecían, lo que hizo que se provocara una sobreoferta en el mercado interno con la consecuente caída en el precio del producto”, añadió.
Echegaray explicó en todos los ámbitos judiciales, incluso en la causa en la que resultó condenado por la situación del Grupo Indalo y la empresa Oil Combustibles, que durante su gestión la AFIP concedió cientos de planes similares para colaborar con la continuidad de las empresas y el mantenimiento de las fuentes de trabajo.
Echegaray fue condenado (la sentencia está en revisión ante la Cámara de Casación) pero los empresarios Cristóbal López y Fabián De Sousa resultaron absueltos.