Una vez que finalicen mañana las ruedas de reconocimiento, los diez rugbiers detenidos por el asesinato a golpes de Fernando Báez Sosa serán trasladados al sector de alcaidía de la Unidad 6 de Dolores, donde no tendrán contacto con el resto de la población carcelaria.

Los jóvenes permanecerán allí bajo estricta vigilancia y control hasta que el juez les dicte la prisión preventiva en caso de corresponder y entonces se los asigne a otras unidades, según supo hoy NA de fuentes penitenciarias.

La cárcel de Dólores cuenta con 875 internos alojados y cerca de 480 agentes penitenciarios trabajando. Dispone de 12 pabellones -10 intramuros y 2 extramuros- y el sector de alcaldía al que serán llevados los rugbiers.

La alcaidía tiene capacidad para diez internos, está situada en un primer piso entre dos pabellones evangélicos, y es un espacio especialmente preparado para detenidos que aún no tienen prisión preventiva, indicaron las fuentes.

Los rugbiers fueron sometidos este lunes a nuevas ruedas de reconocimiento, en la tercera jornada de ese trámite judicial, que concluirá mañana.

En tanto, sus teléfonos celulares y el de Pablo Ventura, el joven que había sido implicado y fue liberado, fueron llevados a Mar del Plata para comenzar a ser peritados.