El desempleo del tercer trimestre fue del 20,8%, mucho más que el 11,7% informado oficialmente, si se incluyen a los desocupados inactivos, es decir aquellos que por no estar en procura de un trabajo no están considerados en la estadística y podrían integrar la categoría de "desempleo invisible".

Así lo sostuvo la consultora Invecq, que de todos modos destacó que el porcentaje corregido es notoriamente inferior al del segundo trimestre, en el peor momento de la cuarentena, cuando con la incorporación de los desocupados inactivos fue del 30%, en vez del 13,1% informado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

"Una persona, para ser considerada desempleada, no solo tiene que estar desocupada, sino que tiene que estar activamente buscando un empleo", indicó la consultora para explicar la razón por la que las estadísticas oficiales mostraron un porcentaje inferior.

En ese sentido, la entidad dirigida por Esteban Domecq remarcó que "en momentos como el actual, donde la búsqueda de empleo se dificulta por el aislamiento, se observa una caída muy fuerte de la tasa de empleo, pero sin un correlato de igual magnitud en el crecimiento de la tasa de desempleo".

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Comparación entre el desempleo oficial y el que incluye a los desocupados inactivos

"En lugar de ser contabilizados como desempleados, esos trabajadores que perdieron su ocupación, pero no están buscando otro puesto momentáneamente son considerados inactivos" y por esa razón no están contabilizados en el 11,7% informado el jueves 17 de diciembre.

Invecq subrayó la importancia de esta cuestión metodológica a la hora de interpretar correctamente la dinámica del mercado laboral.

"Al corregir los cálculos de forma tal de considerar desempleado a todo aquel trabajador que haya estado desocupado durante el tercer trimestre del año, encontramos una tasa de desempleo que supera el 20%", un porcentaje que, a juicio de la consultora, "refleja de forma más fehaciente el verdadero drama que caracteriza al mercado laboral argentino en este 2020".

Así como Invecq corrigió la tasa de desempleo del tercer trimestre de 11,7% a 20,8% y la del segundo de 13,1% a 30%, en una comparación de más largo plazo se remontó al peor momento de la crisis económica y social de 2002, en la que el desempleo "oficial" de 21,5% llegó al 23,4% con la corrección señalada.

Las diferentes brechas entre el desempleo oficial y el corregido (1,9 punto porcentual en 2002, 16,9 puntos en el segundo trimestre de este año y 8,9 puntos en el tercero) obedecen a los distintos niveles de inactividad en cada caso.

Invecq destacó que la destrucción de más de 2 millones de puestos de trabajo se concentró "principalmente en el segmento de los asalariados no registrados (los conocidos como empleados "en negro")".

"En comparación con el tercer trimestre del año pasado han disminuido en casi 1,4 millones de trabajadores, es decir, una caída del 30% interanual mientras que del universo total de ocupados la disminución es del 10,7% interanual", indicó.

La entidad acotó que "tradicionalmente, el empleo asalariado informal se concentra en unidades productivas pequeñas y con una menor capacidad de soportar impactos como el de este año, por lo que la fuerte caída en este segmento del mercado laboral podría estar indicando indirectamente la desaparición de una parte importante de este universo de empresas".

"Estas secuelas perdurarán en el mediano plazo y explicarán en gran medida la demora que enfrentará la economía argentina para volver a funcionar en niveles similares a los previos a la pandemia", finalizó.