Tras las aperturas de Valdés, Corrientes debe volver a la fase 1
La provincia mesopotámica fue la primera en pasar a la fase 5. En julio ya autorizaba bares, gimnasios, restaurantes, comercios en su horario habitual y hoteles.
Tras las aperturas que el gobernador de la provincia de Corrientes, Gustavo Valdés, había autorizado mucho tiempo antes que otras provincias, hoy esa provincia debe volver a fase 1 durante cinco días hábiles por un rebrote de casos de Covid-19.
Ayer por la tarde, durante una conferencia de prensa, Valdés anunció asueto para la Administración Pública hasta el día lunes y solicitó que el Poder Legislativo y Judicial adhieran a la medida, así como instó a los correntinos a resguardarse: "Pedimos a la población de la Capital que permanezcan en sus casas estos cinco días", remarcó.
"Corrientes capital tiene hoy 83 casos activos, que realmente es mucho. Sabemos que pueden haber más casos activos derivados y puede estar, en este mismo momento, surgiendo un foco", precisó a la vez que sostuvo "hoy tenemos la trazabilidad pero si seguimos con este nivel de contagios, podemos llegar a perderla. Vamos a tomar medidas hasta el día lunes. Pedimos a los capitalinos que tengan paciencia".
Corrientes fue la primera provincia en pasar a fase 5. En julio ya autorizaba bares, gimnasios, restaurantes, comercios en su horario habitual y hoteles.
Además, a principios de agosto Valdés había generado polémica al obligar el pago de hisopados a todo aquel que quisiera entrar a la provincia, algo que varios juristas consideran inconstitucional, y que generó malestar sobre todo en productores de la zona que consideraron la medida "arbitraria".
En aquel momento, medios periodísticos locales detallaron que muchos automovilistas llegaron a los puestos de control y tuvieron que regresar porque no tenían los 5.300 pesos que exige Corrientes para pagar los hisopados y así ingresar a la provincia. Las mayores quejas y malestar llegaron de productores de la provincia de Entre Ríos, quienes marcaron, incluso, que es una medida perjudicial para ellos "y para todo el resto de los habitantes del país".
Su gestión de la pandemia también fue cuestionada cuando el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich anunció que denunciaría a su par de Corrientes por disponer el aislamiento por la fuerza de médicos correntinos que trabajan en la provincia vecina. La decisión de Valdés complicó mucho al sistema de salud chaqueño, sobre todo a clínicas y sanatorios privados, que es donde mayoritariamente trabajan estos profesionales.
Hace unos 10 días, el propio Valdés y todo su gabinete debió ser aislado por contacto estrecho con un caso de coronavirus del Secretario de Deportes.