El ex embajador argentino en China durante el Gobierno de Cambiemos, Diego Guelar, consideró hoy que el desplazamiento del actual máximo representante diplomático argentino en el gigante asiático, Luis María Kreckler, fue "para encontrar un chivo expiatorio del fracaso".

En diálogo con el programa "Crónica de una Tarde Anunciada", que conduce Nelson Castro por Radio Rivadavia, el ex funcionario macrista opinó que la decisión de separar a Kreckler de su cargo no obedece a una "mala gestión de una embajada" sino a "una inconsistencia del poder Ejecutivo en política exterior".

"Claramente es para encontrar un chivo expiatorio del fracaso", sentenció, poniendo en duda las versiones sobre la falta de eficacia de Kreckler para cerrar la negociación comercial con China a fin de comprar la vacuna contra el coronavirus que se fabrica en ese país.

Para Guelar, existe una "falta de rumbo" en la política interna del Gobierno, lo cual repercute en la política exterior.

Sobre el intento malogrado de negociación con China, señaló que "no es un hecho aislado, no es una mala gestión de una embajada, esto es una inconsistencia del poder Ejecutivo en política exterior, sin lugar a duda".

"El embajador llegó en agosto, se instala en un destino prioritario, y en diciembre se lo retira. No es un gesto de una política exterior con un socio creciente y principal socio comercial", cuestionó.

En este sentido, indicó que no debería descuidarse el vínculo diplomático con una potencia como China, al que calificó como un "socio muy importante", que colaboró al principio de la pandemia con insumos y equipamiento sanitario.

"Estamos hablando de una negociación de una vacuna, si el embajador fuera científico, sin lugar a duda tendría un rol especial. El que tiene es un rol de acompañamiento", dijo en defensa de Kreckler.