El trajín diario de funcionarios, empleados y personal administrativo y de seguridad que caracteriza a la Casa Rosada desapareció hoy casi por completo con la cuarentena general decretada por el presidente Alberto Fernández ante la pandemia de coronavirus.

El mandatario decidió llevar adelante toda su actividad en la Residencia Presidencial de Olivos y no asistir a Balcarce 50, una determinación que fue copiada por el resto de los ministros que componen el Gabinete.

Los empleados de la Casa de Gobierno recibieron asueto para los días 20, 25, 26, 27 y 30 de marzo, por lo que este viernes el edificio histórico funcionaba con el personal mínimo e indispensable para mantener algunas de sus puertas abiertas.

Los pasillos, salones y patios de Balcarce 50 se mantenían inhóspitos y bajo silencio sepulcral, que sólo se quebraba cuando pasaban empleados de limpieza o de la Policía Federal.