El presidente Alberto Fernández recibió hoy por segunda vez en este mes en la Quinta de Olivos a los sindicalistas de la cúpula de la CGT, con quienes habló sobre la vacuna rusa, de la deuda estatal con las obras sociales gremiales y la necesidad de una reactivación económica el año próximo para comenzar a salir de la crisis por la pandemia.

Se trató de un asado que compartieron el mandatario y la delegación cegetista, tras el encuentro que habían mantenido el 1 de diciembre pasado, y del que participaron uno de los secretarios generales, Héctor Daer (Sanidad), y los miembros de la "mesa chica" de la central Andrés Rodríguez (UPCN), Gerardo Martínez (UOCRA), Armando Cavalieri (Comercio), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias), Antonio Caló (UOM) y Jorge Sola (Seguros).

Durante el encuentro, Fernández le transmitió a los gremialistas que la vacuna rusa Sputnik V llegará a la Argentina antes de fin de año y les planteó que será tan efectiva como las demás, según trascendió.

También el mandatario comentó que no se sabe aún si habrá que repetir las dosis de la vacuna contra el coronavirus todos los años, como ocurre con la de la gripe, en tanto que los sindicalistas pusieron a su disposición sus centros vacunatorios.

También se habló en la reunión, que se extendió por más de dos horas, de la deuda que el Estado mantiene con las obras sociales sindicales, que viene ascendiendo en el último tiempo, por lo que es uno de los temas que mayor preocupación está generando en la CGT.

Para afrontar la desfinanciación de las obras sociales, los gremialistas pidieron que sea el Estado el que se haga cargo de pagar los medicamentos más caros mediante un fondo especial destinado a ese fin, y también se descuente el 15% para el sistema de obras sociales a quienes pagan una diferencia para atenderse en una prepaga y que actualmente no aportan al Fondo Solidario de Redistribución.

Además se habló de la situación económica en medio de la crisis de la pandemia, sobre lo cual Fernández se mostró optimista en un repunte para 2021 en varias actividades.

Por último, analizaron el plan de viviendas con el que el Gobierno busca sumar a la CGT, con los gremios aportando los terrenos para construir los complejos habitacionales y que los paguen los trabajadores mediante un préstamo a tasa baja.

En el almuerzo, acompañaron a Fernández, el secretario general de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz; el ministro de Trabajo, Claudio Moroni y el secretario general de Presidencia, Julio Vitobello.

De esta forma, tras el acto que compartió esta semana con Hugo Moyano, el Presidente volvió a hacer equilibrio y se vio por segunda vez en menos de 20 días con los líderes cegetistas, quienes están enfrentados al camionero y meses atrás venían mostrando malestar con el Gobierno por la falta de interlocución que tenían con el propio Fernández y sus funcionarios.