En medio de un debate encendido y con manifestaciones fuera del Congreso a favor y en contra del proyecto, la Cámara de Diputados se encaminaba esta noche a aprobar la iniciativa oficial de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE).

De acuerdo a estimaciones de fuentes parlamentarias, la votación se produciría cerca de las 6:00, luego de que culminen sus discursos los 167 oradores anotados: el sector "verde", transversal, asegura que ya tiene los votos suficientes para lograr una mayoría, que no sería demasiado holgada.

Miles de personas, en su mayoría mujeres con tapabocas y pañuelos verdes o vestimenta alusiva a la Campaña por el aborto legal, acompañaban desde las calles el desarrollo de la sesión, a través de monitores gigantes colocados en avenidas aledañas al Congreso.

Sobre la avenida Hipólito Yrigoyen, y separados por vallas para evitar enfrentamientos, se concentraban los grupos autodenominados "provida", con pañuelos y barbijos celestes.

La sesión especial comenzó con la presencia de 105 diputados presentes y 45 conectados de manera remota, y pese a que los muchos de los discursos tuvieron un tono enérgico y pasional, no se recreó el clima de confrontación que tuvo el debate de 2018.

Mensaje conciliador en el inicio del debate.

Con un mensaje conciliador, el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, inauguró el debate con un llamado a evitar descalificaciones entre los "verdes" y "celestes", y a "no perder de vista ni el respeto ni la capacidad de escuchar a los otros" durante la jornada.

Luego, el tigrense se retiró del recinto para recibir en su despacho a los ministros de Salud, Ginés González García, de las Mujeres y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta, y de Seguridad, Sabina Frederic; a la secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra; a la directora de ANSeS, Fernanda Raverta; y al presidente de la comisión de Acción Social y Salud Pública en Diputados, Pablo Yedlin.

Durante el transcurso del debate, se fue develando el sentido del voto de algunos diputados que aparecían como "indecisos" en la previa.

Por ejemplo, la ex gobernadora catamarqueña Lucía Corpacci se presentó en su banca envuelta en el pañuelo verde de la Campaña por el Aborto Legal, mientras que Francisco Guevara confirmó que también votará a favor de la iniciativa.

La sorpresa la dio la misionera del Frente Renovador de la Concordia Flavia Morales, quien en 2018 había votado en contra y modificó en 180 grados su postura dos años después: votará a favor.

En cambio, la cordobesa Alejandra Vigo, esposa del gobernador Juan Schiaretti, quien se había abstenido en 2018, informó que votará en contra al igual que los otros tres diputados de Córdoba Federal.

En el arranque de la sesión, hubo dos intentos de la Coalición Cívica de trabar el debate y postergarlo, a través de mociones que fueron rechazadas.

En primer lugar, la santafesina Lucila Lehmann pidió aplazar el tratamiento hasta después del 6 de enero de 2021, a raíz de la cercanía de las fiestas de fin de año, sensibles a la tradición cristiana; y después el bonaerense Javier Campos reclamó someter la discusión a una consulta popular.

Como miembro informante del Frente de Todos, Cecilia Moreau fue la encargada de abrir la ronda de discursos y afirmó que iniciar la discusión un 10 de diciembre es una "fecha simbólica" para "conquistar un nuevo derecho".

A su entender, el proyecto "viene a ofrecer una respuesta concreta a un problema de salud pública y estructural que existe" en la Argentina.

En representación de la postura de rechazo, la primera en exponer fue la vicepresidenta de la comisión de Salud, Carmen Polledo (PRO), quien insistió en que el embrión ya conforma un organismo vivo y no solamente un conjunto de células.

"Nosotros nos la jugamos. No somos tibios. Defendemos lo que queremos. Defendemos la vida. La prueba más contundente no es jurídica, ni científica, ni siquiera ética: es el amor de la madre y el hijo que lleva adentro.", afirmó.

Un momento de tensión se vivió cuando la santafesina del Frente de Todos Vanesa Massetani apuntó de forma desafiante contra los funcionarios del Gobierno que habían llegado a la Cámara baja para respaldar el proyecto.

"Ningún funcionario va a decirme lo que yo voy a hacer, fueron elegidos a dedo, a mí me eligió el pueblo", fustigó, dejando atónitos al resto de los diputados.

Sin nombrarlo, cuestionó al ministro González García por definir al embrión como un "fenómeno"

"A veces resulta gracioso escuchar a expositores y funcionarios, el esfuerzo dialéctico que tienen que hacer para no llamar a las cosas por su nombre", recriminó.

Otra intervención saliente fue la de la diputada "verde" Adriana Cáceres (PRO), quien reveló que se encuentra embarazada de 19 semanas después de buscarlo durante años.

"Es un embarazo sumamente deseado, buscado por años, donde con mi marido tuvimos que transitar momentos difíciles, incluidos abortos naturales", relató, y concluyó con una consigna: "La maternidad será deseada o no será".

Un momento emocionante se vivió luego con la intervención de la entrerriana Blanca Osuna (Frente de Todos) desde el sanatorio donde se encuentra internada por un cuadro de coronavirus: fue ovacionada.

La diputada del PRO Dina Rezinovsky calentó el debate al acusar al oficialismo de "comprar" votos a favor del aborto legal "con la billetera".

"Con la billetera están comprando diputados oficialistas, me frustra saber que estén dando vuelta diputados", denunció.

"Esa marea (verde) de la que hablan es un simple charquito", chicaneó, al cuestionar a los militantes a favor del aborto.

Integrante de la comunidad evangélica, Rezinovsky agregó: "Yo no voy a hablar desde la religión, aunque bien podría hacerlo, pero si tanto les molesta Dios, sáquenlo de la Constitución".

Yedlin (Frente de Todos) comenzó su discurso agradeciendo al presidente Aberto Fernández y a la vicepresidenta Cristina Kirchner "por enviar al Congreso el proyecto de interrupción voluntaria del embarazo y el proyecto de los mil días".

El diputado tucumano advirtió que "decenas de miles de mujeres en la Argentina son internadas todos los años por complicaciones de abortos".

El jefe del bloque de la Coalición Cívica, Maximiliano Ferraro, también defendió el proyecto al sostener que "es el Estado el que debe proteger el derecho de las mujeres y de los cuerpos gestantes de elegir cuando desear una maternidad, cuando tener hijos, cuando planificar nuestras familias, en definitiva, tomar elecciones responsables".

"Creo en la ampliación y reconocimiento de derechos. Por eso mi voto es a favor. A favor de saldar la deuda de la democracia con las mujeres y las personas con capacidad de gestar", expresó.

El proyecto permite el aborto hasta la semana 14 de gestación, un procedimiento que se hará en todos los centros de salud a pedido de la mujer o persona gestante, y se contempla la cláusula de conciencia para los médicos.