La jueza de Ejecución Penal número 1 de Quilmes, Julia Elena Márquez, volvió al país de un viaje del exterior y presentó síntomas similares a los del coronavirus, por lo que la Suprema Corte bonaerense ordenó una cuarentena por prevención para los trabajadores y el cierre momentáneo de ese Juzgado.

La decisión lleva la firma del presidente del Máximo Tribunal de la provincia, Eduardo Néstor de Lázzari "hasta nueva resolución", ya que aún debe aguardarse si la magistrada finalmente tiene esta enfermedad origianada en China.

En la medida se dispuso que los trabajadores se retiren del lugar como un hecho "excepcional y de prevención" ante el coronavirus.

Los Juzgados de Ejecución Penal tienen como función el control de la ejecución de las sentencias, de la suspensión condicional del procedimiento, el trato del prevenido y el cumplimiento de los fines de la prisión preventiva, y la sustanciación y resolución de todos los incidentes que se produzcan durante la etapa de ejecución.

Además, tienen a su cargo el control del cumplimiento de las finalidades constitucionales de las sanciones penales, y la defensa de los derechos de los condenados.