Un avión privado se estrelló cuando intentaba despegar en Texas, Estados Unidos, y los 18 pasajeros y tres tripulantes sobrevivieron.

Imágenes de televisión mostraron a los bomberos rociando agua sobre los restos en llamas del avión, que había atravesado una cerca y se había detenido en una pista en un campo, rodeado de árboles y arbustos,

El fuselaje se redujo a cenizas, y solo la sección de la cola sobrevivió mientras una nube de humo negro salía de los restos.

“Afortunadamente, se informó que los 21 pasajeros, incluidos tres miembros de la tripulación, fueron evacuados de manera segura de este avión bimotor antes de que estuviera completamente envuelto en llamas”, dijo el Departamento de Bomberos de Katy en un comunicado.

Todo sucedió cuando el McDonnell Douglas MD-87 despegó del Aeropuerto Ejecutivo de Houston, Brookshire, con destino a Boston.

La aeronave llevaba a un grupo de personas que viajó a ver un partido de béisbol de playoffs entre los Astros de Houston y los Medias Rojas de Boston el martes por la noche.

Tim Gibson, director de los servicios de emergencia del condado de Waller Harris, dijo que los pasajeros y la tripulación “estaban aturdidos, estaban muy, muy aturdidos, pero pudieron salvarse”.

Los equipos de bomberos extinguieron el fuego “después de un esfuerzo sustancial” para controlar la quema de combustible para aviones.

Las autoridades dijeron que un pasajero era un niño de 10 años y que dos personas fueron trasladadas para recibir tratamiento por lesiones menores.

“El avión no alcanzó altitud al final de la pista y cruzó Morton Road, y se detuvo en el campo al norte del aeropuerto, donde se incendió”, dijo en Facebook el juez del condado de Waller Trey Duhon.