Separatistas ucranianos prorrusos aseguraron que junto con las tropas del Kremlin lograron rodear totalmente la ciudad de Lisichansk, último reducto defendido por el ejército de Ucrania en la provincia de Lugansk, en el que se libraban feroces combates.

"Hoy la milicia popular de Lugansk (ejército separatista) y las fuerzas armadas rusas ocuparon las últimas posiciones elevadas estratégicas, lo que nos permite afirmar que la localidad de Lisichansk está totalmente rodeada", indicó el portavoz del ejército separatista de Lugansk, Andrei Marotchko, citado por la agencia rusa TASS.

No obstante, la Guardia Nacional de Ucrania aseguró que la asediada Lisichansk continúa bajo el control de las tropas ucranianas y no se encuentra rodeada, a pesar de los intensos combates cerca de esta ciudad en la región oriental de Lugansk.

"En los últimos días, como muestran los informes del Estado Mayor General, la situación más difícil se observa en las direcciones de Lysychansk, Bajmut y en la región de Járkiv. Además, en la dirección de Sloviansk, el enemigo está intentando realizar operaciones de asalto y mejorar su posición táctica”, dijo el portavoz de la Guardia Nacional de Ucrania, Ruslan Muzychuk, reprodujo Ukrinform.

Muzychuk aclaró que actualmente se están librando feroces combates cerca de Lysychansk, pero la ciudad en sí no está rodeada y está controlada por las fuerzas ucranianas.

La ciudad gemela, Severodonetsk, separada por el río Donets, cayó en manos de los rusos la semana pasada después de que las tropas ucranianas se retiraran tras semanas de batalla.

La toma de Lisichansk permitiría a los rusos avanzar hacia Sloviansk y Kramatorsk, otras dos ciudades importantes de la región industrial del Donbás, que Moscú quiere conquistar.

Según Muzychuk, al comienzo de la invasión a gran escala de Ucrania, las fuerzas rusas utilizaron misiles más modernos. "Ahora se utilizan misiles de fabricación soviética. Sin embargo, no son menos peligrosos", dijo.