El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseveró que con el diálogo nacional, estamos avanzando hacia una nueva etapa de estabilidad política, en la que sectores que respondían a la agenda de violencia, hoy reconocen la legitimidad del Gobierno Bolivariano y del camino electoral.

En una entrevista el mandatario destacó que la Mesa Nacional de Diálogo, instalada en México, reanuda el reconocimiento mutuo de los actores políticos del país.

Explicó que en  primer lugar, entre las partes. se firmó un memorándum de entendimiento que se ha convertido de obligado cumplimiento en la Asamblea Nacional, y el Gobierno a través del representante plenipotenciario, Jorge Rodríguez, lleva las propuestas al dialogo.

En este sentido, se han presentado dos documentos para ser evaluados. El primero es sobre el levantamiento de todas las sanciones y el regreso de todas las cuentas secuestradas por instituciones financieras internacionales.

En segundo lugar se presentó un documento privado para que la mesa de México presente un pronunciamiento sobre los derechos legítimos venezolanos de la Guayana Eusequiba, indicó el mandatario en el programa de entrevistas de Villegas, que cumplió un año al aire.

Sobre las expectativas de la mesa de diálogo, el jefe de Estado aseguró que su Gobierno va a tener la mayor suma de paciencia y estrategia para alcanzar la recuperación y bienestar de los venezolanos.

Maduro descartó cualquier posibilidad de impunidad para los actores políticos partidarios de medidas coercitivas y responsables de daños económicos contra la nación.

El mandatario venezolano enfatizó que la justicia prevalecerá frente a los innumerables perjuicios ocasionados al pueblo por la política de saqueo de activos y bloqueo de cuentas en el exterior.

"Aquí tiene que haber justicia severa, porque es mucho el daño causado a la familia venezolana; (...) no habrá impunidad ni aquí, ni en México'" aseveró.

Maduro emitió las declaraciones en medio de la jornada de diálogo que se desarrolla en México, con la facilitación de Noruega y el acompañamiento de los Gobiernos de Rusia y Holanda.