Miles de personas volvieron a salir este domingo a las calles de varias ciudades de Israel, pese al rígido confinamiento impuesto este fin de semana, para protestar contra el primer ministro, Benjamin Netanyahu, cuestionado por su manejo de la pandemia y por corrupción, informó la prensa internacional.

Las demostraciones fueron tan numerosas como las que se realizaron todos los fines de semana en los últimos cuatro meses

Aunque las marchas fueron autorizadas en el contexto de la severa cuarentena que rige desde el viernes pasado, los manifestantes, que en general usaron barbijos, no respetaron el distanciamiento social.

La policía informó que había instalado barricadas que fueron derribadas por manifestantes que “no escucharon las reglas” y reportó la detención de una persona que intentó derribar uno de esos parapetos con su automóvil.

Con 187.396 casos confirmados y 1.236 muertes desde el comienzo de la pandemia, Israel tiene la segunda mayor tasa de infección por habitantes, precedido únicamente por Bahrein.