Las fuertes lluvias y los vientos derribaron el viernes un techo en el principal aeropuerto de Nueva Delhi, matando a una persona e interrumpiendo los vuelos desde una terminal nacional, mientras que las calles inundadas y los embotellamientos de tráfico alteraron la vida cotidiana en la capital de la India.

Según la oficina meteorológica de la India, en la zona del aeropuerto cayeron unos 148,5 milímetros de lluvia en tres horas a primera hora de la mañana, más que el promedio de todo junio. 

Los expertos culpan al cambio climático del calor extremo seguido de fuertes lluvias.

La ciudad de 20 millones de habitantes, que enfrentó olas de calor abrasadoras a principios de este mes, recibió 228,1 mm (9 pulgadas) de lluvia en su principal estación meteorológica de Safdarjung en las 24 horas que finalizaron a las 8:30 (0300 GMT) del viernes, una diferencia del 266%. de lo normal. Una parte de la cubierta y la viga de soporte del área de salidas de la Terminal 1 se derrumbaron y las operaciones de vuelo se suspendieron hasta las 14:00 (08:30 GMT), declaró a los periodistas el ministro de Aviación de la India.

Toda la terminal, una de las tres del aeropuerto más grande y concurrido del país, fue evacuada y se ordenó una investigación sobre el colapso, apuntó el ministro Kinjarapu Rammohan Naidu. Se completaron los trabajos de rescate y ocho personas heridas fueron trasladadas al hospital, informó Atul Garg, director del Servicio de Bomberos de Delhi.

Al menos ocho vuelos fueron cancelados y 47 sufrieron retrasos, mientras que las salidas del aeropuerto de Delhi tuvieron un retraso de 40 minutos en promedio, según datos de la plataforma de seguimiento de vuelos Flightradar24. Las imágenes de los canales de televisión indios mostraron un taxi aplastado bajo un pilar de metal destrozado en el área de entrada de la terminal, que es utilizada principalmente por las aerolíneas de bajo costo IndiGo, operada por Interglobe Aviation y SpiceJet.

Entre 10 y 12 vehículos resultaron dañados en el incidente, reveló uno de los trabajadores del aeropuerto.

Extracto y adaptación de un artículo firmado por Aftab Ahmed y Aditi Shah, para la agencia de noticias Reuters