Reino Unido, Australia y EEUU compartirán los secretos de los submarinos nucleares
Los presidentes de los tres países, Joe Biden, Boris Johnson y Scott Morrison, anunciaron en forma simultánea una asociación "histórica" que incluye reforzar sus defensas en la región indo-Pacífico.
El pacto lleva el acrónimo AUKUS por nombre y su primera iniciativa será proveer a Australia con una flota de submarinos propulsados por reactores nucleares, tal y como anunció Morrison durante la comparecencia telemática que efectuaron.
El eje del entendimiento consiste en ayudar a la marina australiana a adquirir una flota de submarinos de propulsión nuclear de miles de millones de libras, en medio de crecientes preocupaciones sobre China.
Ahora empieza un período de 18 meses de consultas entre los tres socios para concretar el resto de las acciones a emprender, explicaron.
En ese lapso se definirá cómo funcionará exactamente la colaboración, cuánto costará, cuántos barcos se construirán, dónde y qué empresas participarán.
Londres, Canberra y Washington reconocieron que también buscarán colaborar en tecnologías cibernéticas, cuánticas e inteligencia artificial, así como en otras capacidades submarinas, áreas en las que las democracias occidentales compiten frenéticamente con sus rivales autoritarios para dominar.
En una declaración conjunta, los tres mandatarios transmitieron que "el esfuerzo que lanzamos hoy ayudará a mantener la paz y la estabilidad en la región del Indo-Pacífico.
"Durante más de 70 años, Australia, el Reino Unido y Estados Unidos trabajaron juntos, con otros aliados y socios importantes, para proteger nuestros valores compartidos y promover la seguridad y la prosperidad. Hoy, con la formación de AUKUS, volvemos a comprometernos con esta visión".
Sin embargo, Australia, que de los tres es el país más próximo a China —con el que acumula varios años de choques diplomáticos y económicos— se beneficiaría así del paraguas tecnológico militar de sus socios.
Ministros de alto rango del gobierno australiano se apresuraron a volver a Camberra para formar parte de las reuniones previas al anuncio.
El primer ministro Morrison tiene previsto viajar a Washington la semana que viene para reunirse con Biden.
Los tres países signatarios del acuerdo ya forman parte de una alianza de inteligencia conocida como Five Eyes (los cinco ojos) junto a Canadá y Nueva Zelanda.
La cooperación en materia de inteligencia entre EEUU y Reino Unido data de la Segunda Guerra Mundial y sus postrimerías, cuando tras derrotar a la Alemania nazi firmaron el tratado 'UKUSA', con el telón de acero y el bloque comunista en mente.
En el marco de este acuerdo tripartito, en esta oportunidad "China" no se mencionó en la declaración, ni en un comunicado de prensa adjunto, pero no caben dudas que el principal desafío de seguridad y defensa que enfrentan las democracias del mundo es el surgimiento de un Beijing cada vez más asertivo y autoritario.
En respuesta, la embajada de China en Washington puso de relieve que los países necesitaban "deshacerse de su mentalidad de Guerra Fría y sus prejuicios ideológicos".
Johnson señaló, por su parte, que "el Reino Unido, Australia y Estados Unidos son aliados naturales, aunque podemos estar separados geográficamente, nuestros intereses y valores son compartidos".
"La alianza AUKUS nos acercará más que nunca, creando una nueva asociación de defensa e impulsando el empleo y la prosperidad", aseveró.
"Esta asociación será cada vez más vital para defender nuestros intereses en la región del Indo-Pacífico y, por extensión, proteger a nuestra gente en casa", redondeó.
"Solo unos pocos países tienen submarinos nucleares", sostuvo el primer ministro británico, al tiempo que afirmaba que esta es una manera de hacer del mundo "un lugar más seguro".
Australia renunciaría a un contrato milmillonario con Francia para adquirir 12 submarinos que no iban a estar disponibles hasta 2030, según informa el 'Financial Review' australiano.
La nueva secretaria de Relaciones Exteriores, Liz Truss, declaró que la "asociación histórica" "refleja el compromiso del Reino Unido de profundizar los lazos en el Indo-Pacífico".
El presidente Joe Biden manifestó: "Todos reconocemos el imperativo de garantizar la paz y la estabilidad en el Indo-Pacífico a largo plazo. "Necesitamos poder abordar tanto el entorno estratégico actual en la región como cómo puede evolucionar", añadió.
Las armadas estadounidenses y británicas ya cooperan muy estrechamente con sus flotas de submarinos de propulsión nuclear, una de las áreas de defensa más secretas, complejas y sensibles.
Se entiende que compartir sus conocimientos con Australia se considera la colaboración sobre capacidades más significativa en décadas.
Los submarinos de propulsión nuclear son superiores a sus homólogos convencionales de propulsión diésel, ya que pueden operar de forma más silenciosa y permanecer bajo el agua durante más tiempo, características fundamentales para un submarino que quiere tener la ventaja sobre su objetivo.
Los barcos que Australia está tratando de adquirir no tendrán armas nucleares, ya que Australia, a diferencia del Reino Unido y los Estados Unidos, es un estado sin armas nucleares.
Los tres aliados establecieron que su colaboración en tecnología nuclear estaría en línea con todos los tratados relacionados con la energía nuclear.
Morrison aseguró que los submarinos se construirán en Adelaida en estrecha cooperación con Estados Unidos y el Reino Unido y destacó que el país "continuará cumpliendo con todas nuestras obligaciones de no proliferación nuclear".
Los líderes, en su declaración conjunta, subrayaron: "Aprovecharemos la experiencia de Estados Unidos y el Reino Unido, basándonos en los programas de submarinos de los dos países para poner en servicio una capacidad australiana en la fecha más temprana posible".
Sin embargo, no se fijó una fecha para la entrada en servicio del primer submarino.
El anuncio parece señalar el final de un plan anterior de Canberra para reemplazar su flota de submarinos actual con más barcos con motor diésel en un acuerdo anunciado en 2017 con una empresa francesa llamada Naval Group.
Se cree que Australia, que necesita ayuda para adquirir su propia flota de propulsión nuclear, se acercó primero al Reino Unido y Estados Unidos sobre la idea de trabajar más estrechamente en marzo de este año.
Las tres naciones ya son miembros de la llamada alianza de intercambio de inteligencia Five Eyes.
Pero la asociación AUKUS busca fortalecer aún más el vínculo. Es posible que en algún momento se unan otros países con ideas afines.
El próximo 24 de septiembre tendrá lugar una cumbre del ‘Quad’, el grupo de países del Indopacífico formado por Australia, India y Japón, además de EEUU.
Nacida en 2007, Biden considera ahora que es “una prioridad” y ya se reunió con sus socios el pasado marzo para luchar contra la influencia de China en la zona.