Las autoridades estadounidenses continúan hoy las investigaciones sobre la explosión en Nashville, Tennessee, que ocasionó tres heridos el día de Navidad, mientras todos los indicios ratifican que fue un acto intencional.

La sucursal del FBI en Memphis encabeza la pesquisa junto con funcionarios locales y la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos, mientras el gobierno de la ciudad de Nashville activó su Centro de Operaciones de Emergencia.

Los investigadores se centran en dos aspectos: la seguridad y la recopilación de pruebas, mientras el fiscal general interino de Estados Unidos, Jeff Rosen, ordenó que todos los recursos estén disponibles para ayudar en la pesquisa.

Realmente intentan determinar cómo sucedió, casi más que por qué, dijo Adam Hall, profesor asistente de Ciencias Forenses Biomédicas en la Facultad de Medicina de la Universidad de Boston.

Es difícil, si no imposible, decir cuánto tiempo les tomaría identificar a un individuo o individuos de interés, añadió el experto.

Las autoridades y encontraron posibles restos humanos en el área, y hasta ahora ningún sospechoso fue identificado públicamente.

Entretanto, el alcalde de Nashville, el demócrata John Cooper, elogió a los seis oficiales de policía que respondieron a la explosión del vehículo en la mañana de Navidad, quienes lograron 'que se salvaran tantas personas'.

Según el diario The Tennessean, los agentes estaban respondiendo a una llamada de emergencia de disparos en el centro de la ciudad alrededor de las 05:30, hora local, y encontraron una casa rodante con una grabación de advertencia de que una bomba detonaría en 15 minutos, tras lo cual evacuaron varios edificios cercanos.

A las 06:30 horas estalló el vehículo, y detruyó edificios, árboles y autos, en el corazón del distrito turístico de la ciudad, añade la publicación.

Horas más tarde, hubo interrupciones en el servicio telefónico e Internet en toda la región, mientras el aeropuerto internacional de Nashville suspendió temporalmente los vuelos, debido a los daños en los sistemas de comunicaciones.

Más de 40 negocios sufrieron daños materiales por la explosión, y un edificio frente al lugar del hecho se derrumbó.

El presidente Donald Trump y el mandatario electo, Joe Biden, fueron informados sobre el atentado de inmediato.

Biden publicó una declaración en la cual él y su esposa Jill agradecieron a todos los socorristas y desearon una pronta recuperación a los heridos.

De acuerdo con The Tennessean, la explosión marca un año agonizante para Nashville: en marzo, un tornado mortal arrasó algunos de los vecindarios más bulliciosos de la ciudad, mientras la pandemia la golpeó duramente y devastó una industria turística que prosperó en los últimos años.