Putin advierte ante una eventual operación de Ucrania en Crimea mientras que Johnson echa leña al fuego
El presidente de Rusia propuso imaginar qué sucedería si aquella nación extendiera su territorio con apoyo de la OTAN. Y el primer ministro británico fue temerario en sus apreciaciones.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, analizó las tensiones que genera la posible incorporación de Ucrania a la OTAN y propuso imaginar qué ocurriría si este país invadiera la península de Crimea, en tanto que desde el bando contrario, el primer ministro británico, Boris Johnson fue temerario al anunciar una lucha "hasta la última gota de sangre".
Putin fue el co protagonista de una rueda de prensa con el primer ministro de Hungría, Víktor Orbán. Allí recordó una vez más las promesas de la Alianza Atlántica formuladas verbalmente en los años 90 acerca de que no se expandiría "ni una pulgada" hacia el este tras la unificación de Alemania.
"Nos engañaron", aseveró, aludiendo a la incorporación de naciones como Polonia, Rumania y los países del Báltico, entre otros, remarca el sitio Actualidad.rt.com
En paralelo, Putin mencionó la salida unilateral de los Estados Unidos del Tratado sobre Misiles Antibalísticos en 2002, pese a los llamamientos de Moscú de no hacerlo.
Esto, a su vez, permite instalar los misiles ofensivos Tomahawk, lo que representa una amenaza para Rusia, según el presidente.
En lo que concierne a una posible adhesión de Kiev a la Alianza, Putin alertó que los documentos doctrinales de Ucrania constatan que el país quiere retomar la península rusa de Crimea, incluso por vía militar.
El jefe del Estado recalcó que si Ucrania, que últimamente está siendo militarizada activamente por Occidente, se incorpora y lanza un ataque en Crimea, Rusia tendría que enfrentarse contra la OTAN.
"Imaginémonos que Ucrania sea un miembro de la OTAN: esté plagada de armas con la instalación de sistemas ofensivos contemporáneos al igual que Polonia y Rumania [...] y empiece una operación militar en Crimea. Esto es territorio soberano de Rusia [...] ¿Tenemos que entrar en guerra con el bloque de la OTAN? ¿Alguien ha pensado algo al respecto? Aparentemente no", aseveró el mandatario.
Además, Putin hizo mención a los acuerdos de Minsk, sellados en 2015 para frenar el conflicto en el este de Ucrania. El líder ruso destacó que a Moscú siempre le acusan de no cumplir con las estipulaciones del pacto, mientras aseguran que Kiev sí quiere aplicarlas.
"Y al mismo tiempo hay declaraciones públicas de que si Ucrania aplica los acuerdos de Minsk, se desmoronará. ¿Nadie ha pensado que al plantear tales amenazas a Rusia, crea amenazas similares para sí misma?", cuestionó.
El mandatario reconoció que cada país tiene derecho a elegir su propio sistema de seguridad pero consideró que los Estados Unidos no están tan preocupado por la seguridad de Ucrania y la usa como una "herramienta" para "contener el desarrollo de Rusia".
En este sentido, el presidente mencionó posibles vías de cómo se llevaría a cabo la contención de Moscú: "Involucrar a Rusia en un conflicto militar e introducir sanciones severas, una posibilidad ya contemplada por Washington y sus aliados europeos".
O bien: "Incluir a Ucrania en la OTAN, desplegar allí sistemas de armas ofensivos e instigar a los grupos radicales ucranianos a resolver de forma bélica el problema de Donbass y de Crimea, lo que implicaría el involucramiento de Rusia".
De su lado, Johnson abordó con el presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski, "la actividad hostil rusa en curso, incluida la concentración militar".
En este sentido, el primer ministro británico destacó el compromiso del Reino Unido con "la soberanía, la independencia y la integridad territorial de Ucrania".
"El Reino Unido está al lado de Ucrania frente a la actual agresión rusa, que amenaza la paz y la seguridad regionales y socava el orden mundial", señala el comunicado.
Asimismo, los mandatarios acordaron trabajar conjuntamente para "reforzar la seguridad y la capacidad de defensa de Ucrania".
Johnson, por su parte, anunció una nueva financiación de 88 millones de libras esterlinas (118,5 millones de dólares) para "contribuir a los esfuerzos de aumentar la resistencia de Ucrania y reducir la dependencia de los suministros energéticos rusos".
"Lo mejor que podemos hacer es informar a los ciudadanos rusos de que los ucranianos lucharán hasta la última gota de sangre", indicó Johnson en la rueda de prensa conjunta tras la reunión, en referencia a una supuesta invasión rusa.