El presidente de Paraguay, Santiago Peña, promulgó la ley que establece medidas de prevención y sanción contra toda forma de discriminación hacia las personas afrodescendientes.

"Hoy dimos un paso importante hacia un Paraguay donde se respeten los derechos de todas las personas sin discriminaciones. Un país unido y libre de discriminación es un país más fuerte", expresó Peña al respecto.

La nueva reglamentación representa un avance histórico en el reconocimiento de los cerca de 4.000 paraguayos afrodescendientes y cumple con el Artículo 46 de la Constitución Nacional paraguaya, que garantiza la igualdad de todos los habitantes, destaca el reporte del Gobierno de Paraguay.

Durante un acto oficial, el mandatario paraguayo destacó en su discurso que esta ley marca el reconocimiento y dignificación de la población afrodescendiente paraguaya, que enfrentó históricamente la exclusión social y el racismo.

Resaltó igualmente la larga historia y contribución de esta comunidad en la construcción del país, al igual que los pueblos originarios y de los inmigrantes provenientes de otras partes del mundo.

Reafirmó su compromiso con la implementación de la normativa, señalando que la tarea principal del Estado es garantizar la vigencia de los derechos fundamentales y que la protección del derecho a la igualdad es un principio básico para el ejercicio pleno de todos los derechos humanos. "La discriminación y los actos de racismo no tienen cabida en nuestra sociedad. Me comprometo a garantizar la participación plena de las personas afrodescendientes en las distintas instancias públicas y a incorporar su legado en la historia del país", concluyó.