La Corte Suprema de Colombia ordenó este martes la detención preventiva con arresto domiciliario del expresidente Álvaro Uribe, que gobernó el país andino entre 2002 y 2020, por un delito de soborno y manipulación de testigos en una de las causas judiciales que lo afectan.

El tribunal investiga un expediente según el cual varios testigos recibieron compensaciones a cambio de brindar testimonios que favorecen al exmandatario y actual senador.

El caso se remonta a 2012, cuando Uribe presentó una denuncia contra el senador progresista Iván Cepeda ante la Corte Suprema por un supuesto complot, con falsos testigos en cárceles colombianas, con el fin de involucrarlo en actividades de grupos paramilitares. Sin embargo, el máximo tribunal se abstuvo de procesar a Cepeda y pidió investigar a Uribe bajo la sospecha de haber manipulado testigos contra el legislador del Polo Democrático.

Es una decisión sin precedentes en Colombia. Uribe, fundador del actual partido de Gobierno, el Centro Democrático, y mentor político del presidente Iván Duque, ocupa actualmente una banca en el Congreso tras convertirse en 2018 en el senador más votado en la historia del país.

El mismo Uribe confirmó la decisión de la Corte a través de sus redes sociales. "La privación de mi libertad me causa profunda tristeza por mi señora, mi familia y por los colombianos que todavía creen que algo bueno he hecho por la patria", escribió en su cuenta de Twitter.

https://twitter.com/AlvaroUribeVel/status/1290712262504779784

La investigación se centra en esta fase en determinar si personas vinculadas a él, como sus abogados, y con su consentimiento, pagaron dinero y ofrecieron beneficios judiciales a exparamilitares para que se retractaran.

La denuncia original de un paramilitar señala que en una antigua propiedad de la familia Uribe operaba el grupo Los 12 Apóstoles, una organización paramilitar.

El presidente Duque dijo: "Seré siempre un creyente de la inocencia de Álvaro Uribe. Yo creo que es una persona que en todo su comportamiento está la palabra honorabilidad". Otros funcionarios de alto rango también se pronunciaron a favor de Uribe.

Los sectores de oposición consideraron estos pronunciamientos como presiones a la justicia. El senador Cepeda había pedido al Centro Democrático "cesar en sus intentos por intimidar y presionar a los magistrados de la Corte", y a Duque comportarse como un jefe de Estado "y no como defensor de oficio de su mentor político".

Cerca de la medianoche del lunes, todas las altas cortes publicaron un comunicado conjunto para hacer un llamado al respeto del poder judicial y su independencia. "Las providencias judiciales tienen instancias legales para ser controvertidas. De ahí que sean inaceptables descalificaciones a decisiones judiciales por adoptar y sin que aún se conozca su contenido, sentido o alcance", declararon.