El primer ministro Benjamín Netanyahu prometió una respuesta israelí más contundente ante la oleada de ataques palestinos en Jerusalén y la Cisjordania ocupada, mientras aumentaban las presiones en el seno de su gobierno de derecha para que emplee tácticas más severas.

Sus declaraciones se produjeron dos días después de que un conductor atropelló a varias personas en las afueras de Jerusalén, dejando tres israelíes muertos, y dos semanas después de que un palestino mató a siete personas a tiros en las puertas de una sinagoga.

La tensión también es alta en Cisjordania, donde las fuerzas israelíes han llevado a cabo cientos de detenciones en los últimos meses durante redadas casi diarias en las que se han producido sangrientos tiroteos con milicianos palestinos. Este año han muerto al menos 42 palestinos, entre hombres armados y civiles.

"El Consejo de Ministros se reúne hoy para preparar una acción aún más amplia contra los terroristas y quienes los apoyan en Jerusalén Este y Judea y Samaria, evitando en la medida de lo posible dañar a quienes no están implicados", dijo Netanyahu, utilizando un término común en Israel para referirse a Cisjordania. No ofreció detalles concretos en sus comentarios al comienzo de la reunión del gabinete.

Itamar Ben-Gvir, ministro de Seguridad Nacional de Netanyahu, de extrema derecha, dijo sin embargo que la policía ya había iniciado una importante campaña de represión en Jerusalén Este que incluiría medidas desde la entrega de multas de tráfico hasta la demolición de casas de atacantes palestinos.

Ben-Gvir, ultranacionalista de línea dura contra los palestinos, fue recibido en el lugar del atropello del viernes por una multitud enfurecida que exigía medidas.

En El Cairo, el presidente palestino, Mahmud Abbas, afirmó que los palestinos se enfrentan a un "ataque letal" y reiteró su promesa de emprender acciones contra Israel ante las Naciones Unidas y la Corte Penal Internacional.

Ben-Gvir dijo a periodistas antes de la reunión del gabinete que estaba decidido a llevar a cabo una operación en Jerusalén similar a una campaña militar a gran escala que Israel lanzó en Cisjordania durante un levantamiento palestino hace 20 años.

Su referencia a la operación conocida como "Escudo Defensivo", que tuvo lugar hace 20 años y en la que se libraron importantes combates en las calles de Cisjordania, fue tachada de equivocada por varios ex funcionarios de seguridad en entrevistas concedidas a los medios de comunicación.

"Parece un comentario que no está respaldado por una comprensión profunda de lo que hay que hacer", declaró a Radio Israel el ex asesor de Seguridad Nacional Yaakov Amidror.

Fuente: Reuters.