Un periódico de Kansas cuyas instalaciones fueron registradas por la Policía informó que su copropietario, Joan Meyer de 98 años, murió debido al estrés relacionado con el incidente, que los defensores de la libertad de prensa condenaron como una posible violación de la Primera Enmienda del Registro del Condado de Marion. 

Una orden de registro, autorizada por un juez del Tribunal de Distrito del condado de Marion, indicó que había causa probable para creer que hubo robo de identidad y actos ilegales relacionados con las computadoras, según una imagen de la orden publicada por la organización de noticias Kansas Reflector.

En una historia publicada en su sitio web, el Record dijo que el registro de su oficina estaba relacionado con un reportero que verificaba un cargo por conducir ebrio contra el dueño de un restaurante local, Kari Newell, de acuerdo con esta historia que relata la agencia de noticias Reuters que no pudo comunicarse con Newell o la reportera, Phyllis Zorn, para entrevistarlos, en tanto que sus llamadas al Marion Country quedaron sin respuesta.

La Policía también visitó el hogar de Meyer

The Record comentó en su artículo que Meyer no había podido comer ni dormir después de que la Policía se presentara en la puerta de su casa el viernes con una orden de allanamiento y le quitara la computadora y el enrutador.

Reuters no pudo establecer el estado de salud de Meyer antes de que se cumpliera la orden y no pudo comunicarse con el médico forense del condado de Marion para confirmar la causa de la muerte.

La policía del condado de Marion también registró la oficina del periódico el viernes y confiscó teléfonos celulares personales, computadoras y el servidor del periódico, entre otros equipos, añadió el Record.

El jefe de policía de Marion, Gideon Cody, no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios de Reuters este domingo, día en que el restaurante de Newell permanece cerrado.

"Por mucho que me gustaría darles a todos detalles sobre una investigación criminal, no puedo. Creo que cuando el resto de la historia esté  disponible para el público, el sistema judicial que está siendo cuestionado será reivindicado", se defendió Cody a través de un comunicado.

Tales procedimientos son muy inusuales dado que las organizaciones de noticias están en gran medida protegidas de la intrusión del Gobierno bajo las garantías de libertad de prensa de la Primera Enmienda de la Constitución de los EE. UU. 

Un asalto a los cimientos mismos de la democracia

La Asociación de Prensa de Kansas describió el allanamiento como "sin precedentes" y "un asalto a los cimientos mismos de la democracia".

El Comité de Reporteros por la Libertad de Prensa, con sede en Washington, también condenó el registro policial y exigió que se devolvieran todos los materiales incautados.

"Parece que no hay justificación para la amplitud y la intrusividad de la búsqueda, particularmente cuando pueden haber estado disponibles otros pasos de investigación", escribió el comité en una carta abierta a Cody.

La carta fue firmada por más de 30 importantes organizaciones de  medios, incluidos Reuters, Associated Press, New York Times y Washington  Post.