El laboratorio de Genética de la Universidad de Medicina de Innsbruck reportó una coincidencia genética muy importante entre uno de los restos recuperados en la Barranca de la Carniceria y la familia del estudiante desaparecido Jhosivani Guerrero de la Cruz. La coincidencia  se obtuvo vía ADN nuclear.

El resto óseo fue recuperado en octubre de 2020 por la Unidad Especial de Investigación y Litigación para el Caso Ayotzinapa de la Fiscalía General de la República, a cargo del Maestro Omar Gómez Trejo

El Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) colaboró en el análisis de restos óseos hallados en la zona y en la selección de las muestras para procesamiento genético en Innsbruck.

El informe recibido de Innsbruck detalla lo siguiente sobre la muestra que arrojó un perfil genético completo: “los datos genéticos nucleares [provenientes de la muestra ósea]  tienen al menos un billón de veces de veces más probabilidades de ser (…) de un hijo biológico de la madre y del padre y de un hermano biológico completo (…) de las hermanas y el hermano de Jhosivani Guerrero de la Cruz en comparación con que los restos no identificados sean originados por un individuo no relacionado”.

Esto significa que el resto óseo analizado tiene al menos mil millones de probabilidades más de pertenecer al estudiante desaparecido que a una persona no relacionada a esta familia.

El EAAF realizó un dictamen de genética complementario, con cálculos estadísticos adicionales sobre probabilidad de parentesco y genética poblacional, que arroja un porcentaje de parentesco superior al 99,99%, teniendo en cuenta las variables estadísticas aplicables a este caso.

El resto óseo con coincidencia genética con la familia de Jhosivani corresponde a una vértebra lumbar que no presentaba alteración térmica. Fue hallada en octubre de 2020 en la Barranca de la Carnicería como parte de una diligencia de búsqueda realizada por la Unidad Especial para el Caso Ayotzinapa de la FGR, dirigida por el maestro Omar Gómez Trejo. A lo largo de sucesivas diligencias en la zona desde 2014 a la fechase hallaron cientos fragmentos óseos no articulados dispersos en superficie.

Adicionalmente, entre los nuevos resultados reportados por Innsbruck, otro resto óseo (fragmento de calcáneo) reasoció genéticamente con los familiares del joven Christian Alfonso Rodríguez Telumbre. En julio de 2020, ya se había informado públicamente que un fragmento de hueso encontrado también en La Barranca de la Carnicería tuvo una coincidencia genética con la familia del joven Christian.

Las familias de Jhosivani, de Christian y de los restantes alumnos desaparecidos ya fueron informadas de estos resultados por el EAAF -como perito de los familiares-, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez AC, el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan -ambos representantes legales de los familiares-, la Unidad Especial de Investigación y Litigación para el Caso Ayotzinapa y el subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaria de Gobernación.

Según dijo Mercedes Doretti, miembro fundadora y directora para Centro y Norte América del EAAF, “estos resultados son extremadamente dolorosos para los familiares del joven Jhosivani Guerrero de la Cruz. Le expusimos a la familia por qué estos resultados son concluyentes. A la familia de Christian Alfonso Rodríguez Telumbre le informamos lo que significa una ´reasociación´, cuando luego de una coincidencia genética aparece un nuevo resto, como este caso. Como EAAF, apoyamos los resultados enviados desde la Universidad de Innsbruck para ambas coincidencias genéticas. El EAAF seguirá trabajando junto a las familias de los 43 estudiantes, sus representantes legales y la Unidad Especial para el Caso Ayotzinapa de la FGR para llegar a la verdad de lo ocurrido.”

Un profesional del EAAF, junto al fiscal Gómez Trejo, participó del traslado de las muestras seleccionadas hacia Austria y 19 de febrero de 2021 hizo entrega conjunta de las mismas al laboratorio genético de Innsbruck.

. La diferencia con los resultados referidos a Jhosivani Guerrero de la Cruz de 2015

En el 2015, las autoridades de ese entonces a cargo de la PGR anunciaron una coincidencia genética de la familia de Jhosivani Guerrero de la Cruz con restos supuestamente hallados en el Río San Juan. En ese momento el EAAF informó que consideraba que los resultados no eran concluyentes y hoy lo seguimos sosteniendo.

Los nuevos resultados de 2021 del laboratorio de Innsbruck sobre la muestra en cuestión  los restos hallados se alcanzaron gracias a la recuperación de ADN nuclear, que es resultante de la combinación única de un padre y una madre, y pueden alcanzar valores de probabilidad de parentesco  de 99,99% o superiores. Esta diferencia fue explicada en detalle a la familia Guerrero de la Cruz.

. Caso Ayotzinapa para el EAAF

Desde octubre del 2014, el EAAF actúa como perito independiente a pedido de los familiares de los 43 estudiantes desaparecidos y las organizaciones que los acompañan. Esta colaboración la realiza junto con el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez AC y el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan que acompañan y representan legalmente a los familiares de los 43 estudiantes.

Entre 2015 y 2016 el EAAF también colaboró con el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), quien se instaló durante ese período en México para  investigar el caso.

En el año 2017, con autorización de los familiares de los 43 estudiantes, el EAAF comisionó -junto con el Centro PRODH- la reconstrucción de la escena del crimen de la noche del 26 al 27 de septiembre del 2014 en Iguala (Guerrero), a Arquitectura Forense (Forensic Architecture), ONG inglesa que investiga violaciones a los derechos humanos utilizando plataformas digitales interactivas. En conjunto se desarrolló una cartográfica interactiva para explorar la narrativa oficial, sus conflictos e inconsistencias sobre lo ocurrido esa noche, comparándola con aquella proveniente de sobrevivientes y testigos.

Desde el 2014 hasta la fecha, el EAAF continúa participando en las búsquedas forenses y análisis de pruebas sobre los estudiantes desaparecidos. En los últimos dos años, el EAAF actuó coordinadamente con la Unidad Especial de Investigación y Litigación para el Caso Ayotzinapa dirigida por el maestro Oscar Gómez Trejo.

. El EAAF

El Equipo Argentino de Antropología Forense es una organización científica independiente, sin fines de lucro. Lleva 37 años buscando, recuperando e identificando personas desaparecidas.

Fue fundado en 1984 para aportar evidencia científica en los procesos de verdad y justicia impulsados por los familiares de desaparecidos de la dictadura militar en Argentina. Rápidamente fue convocado por otros países latinoamericanos que salían de procesos de violencia para colaborar en investigaciones similares.

Desde su fundación, el EAAF trabajó en más de 65 países de todos los continentes. Su oficina central se encuentra en Buenos Aires, Argentina, y tiene una sede en Nueva York, desde la que dirige sus proyectos para Centro y Norte América.