Al menos 25 personas murieron en el estado de Tennessee, en los Estados Unidos, como consecuencia del paso de tornados, que, además, dejaron como saldo varios desaparecidos y decenas de heridos, casas y edificios muy dañados incluido el centro de Nashville, la capital del estado.

Solamente en Nashville al menos 40 estructuras, entre viviendas y edificios comerciales fueron destruidas por el fenómeno, lo que motivó que el gobernador estatal, el republicano Bill Lee, declarara el estado de emergencia y se abran al menos cuatro refugios.

Las autoridades consideran que éste ha sido uno de los desastres más poderosos que ha impactado en este estado del sureste de EE UU y comparable al que exactamente hace un año se registró en el vecino de Alabama.