La Corte Suprema de Estados Unidos decidió hoy que continúe el programa de Acción Diferida Para los Llegados en la Infancia (DACA), que protege de la deportación a centenares de miles de jóvenes hijos de inmigrantes.

En una decisión ajustada, por 5 votos a favor y 4 en contra, el máximo tribunal de justicia rechazó la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de poner fin al programa que desde hace ocho años protegió a muchos indocumentados que llegaron al país cuando eran niños .

El Presidente del Tribunal Supremo, el conservador John Roberts, se unió a los cuatro jueces progresistas para determinar que sería "caprichoso" y "arbitrario" poner fin al programa que fue puesto en marcha durante la presidencia de Barack Obama para dar protección contra las deportaciones y permisos de trabajo a estos jóvenes, principalmente oriundos de América Latina.

El fallo implica que los casi 700 mil inmigrantes, en su mayoría jóvenes adultos actualmente inscritos en DACA, permanecerán protegidos de la deportación y serán elegibles para obtener permisos de trabajo renovables de dos años.

La reacción del presidente Donald Trump no se hizo esperar: "Estas decisiones horribles y políticamente cargadas que salen del Tribunal Supremo son como ráfagas de escopeta en la cara de la gente que se enorgullece de llamarse republicanos o conservadores", escribió su cuenta de Twitter.