La Palma: el volcán entró en su sexta semana de erupción

El fenómeno natural, que ha alertado a la población española y que cada día se intensifica con más fuerza, entró en su sexta semana de erupción. Según el último informe del Departamento de Seguridad Nacional (DSN), “la amplitud de la señal de tremor volcánico aumentó de forma considerable, con numerosos pulsos de intensificación”.

“De todos los terremotos localizados, 110 tienen una magnitud igual o superior a 3,0 mbLg y cuatro de ellos tienen una magnitud de 4,0 mbLg, que es la magnitud máxima del periodo considerado”, agregó el comunicado.

Asimismo, informaron que tras la reconfiguración del cono volcánico se produjo una nueva colada en dirección sur y que el resto de las coladas “mantienen la carga de lava con un aporte de flujo que discurre por tubos lávicos que alimentan tanto la colada primigenia como dos de las situadas al norte: una, la próxima a la montaña de Todoque y la otra, en La Laguna”.

También brindaron datos de la superficie afectada por lava: el pasado domingo aumentó hasta alcanzar las 852,27 hectáreas, a raíz del “derrame lávico del sur y a los huecos que se han rellenado en las zonas intermedias”.

De momento, ninguno de los sismos superó al que tuvo lugar el pasado 23 en Mazo, cuando alcanzó 4,9 de intensidad IV, a 38 kilómetros de profundidad; se trata del terremoto más importante de los registrados desde que el volcán entró en erupción.

Sobre la situación impactante en la que se encuentra la población, el presidente del Gobierno español Pedro Sánchez anunció que apuraría la ayuda para los sectores agrícola y pesquero de la isla de La Palma, los cuales se vieron bastante golpeados tras la erupción.

El mismo, a principios de octubre, había anunciado que el Gobierno destinaría 206 millones de euros a la isla para reconstruir infraestructuras e impulsar el empleo, la agricultura y el turismo.

No sólo ha deteriorado estos tres puntos vitales para la isla, sino que la lava también cubrió hasta -el momento- casi 900 hectáreas, lo que llevó a destruir más de 2.000 construcciones. Más de 7.000 personas tuvieron que evacuar y abandonar sus hogares desde el inicio de la erupción volcánica, que tuvo lugar el 19 de septiembre.

El IGN (Instituto Geográfico Nacional) continuará con el seguimiento de la actividad sísmica, el cual se podrá seguir a través del Visualizador de Terremotos en Canarias.