La ONU llama a evitar que hombres solteros hospeden a refugiadas ucranianas
El drama de la población civil ucraniana es vasto. Y las mujeres de todas las edades se llevan la peor parte. Hay historias desgarradoras.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) formuló un llamamiento al Reino Unido para que evite que las mujeres y los niños ucranianos sean hospedados por hombres británicos solteros mediante el plan gubernamental de asilo Hogares para Ucrania.
Según declaraciones hechas por ACNUR a The Guardian, esto se debe a que ha habido informes de que algunos hombres solteros están utilizando este programa de ayuda para aprovecharse de mujeres vulnerables.
Pero esta noticia es apenas un detalle dentro de un contexto vasto, que ofrece historias desgarradoras por donde se enfoque la tragedia de la población civil, tanto la que se quedó dentro de Ucrania como la que pudo salir a buscar una mejor suerte en Europa.
De hecho, varias refugiadas han comenzado a anunciarse en plataformas de redes sociales en un intento por encontrar un hogar, lo que generó preocupaciones sobre su seguridad, informaron medios internacionales.
La ACNUR pide "un proceso de emparejamiento más apropiado" y que las mujeres ucranianas, ya estén solas o con niños, sean hospedadas por familias o parejas.
Desde que se lanzó el plan Hogares para Ucrania el pasado 18 de marzo, más de 200.000 personas han registrado su interés en acoger a refugiados ucranianos que llegan al Reino Unido sin vínculos familiares.
A las personas que se convierten en anfitriones, el programa les ofrece una remuneración opcional de unos 458 dólares mensuales.
El "trato violento y degradante" que Varsovia da a las personas desplazadas provenientes de Bielorrusia contrasta enormemente con el que brinda a las que llegan de Ucrania, informó días pasados la organización Amnistía Internacional y replicó rápidamente el medio ruso Actualidad RT.
Mientras tanto, el panorama que ofreció Susana Ramonda, docente directiva de la Universidad Católica de la República Oriental del Uruguay y analista internacional en una entrevista con el canal France 24 después de su recorrida por campos de refugiados en Europa, resulta sobrecogedor.
Ramonda subrayó que quedó muy mal anímicamente después de haber compartido viajes y horas con los refugiados, a bordo de los ómnibus que los trasladan a diferentes puntos de Europa, donde se les ofreció asilo.
"Pasan sin controles aduaneros de un país a otro, lo que supone una ventaja pero eso también es un riesgo porque como hay personas de buena voluntad dispuestas a ayudar, también pueden aparecer aquellas que tienen malas intenciones", destacó Ramonda, quien reveló que observó una ausencia total del Estado en los diferentes países.
Entonces graficó: "Los refugiados van a centros de exposiciones, construcciones de chapa por donde pasa el frío o la lluvia. Las mujeres se ven hacinadas. Y dependen de voluntarios de 20 años que los escuchan y muchas veces no tienen respuesta. El Estado está ausente. Hay demasiada gente en Bruselas y poca donde están los refugiados ucranianos, que de por sí cuentan con muchas más ventajas comparativas con afganos, colombianos y sirios".
Ramonda contó el caso de una abuela de 96 años quien está en tránsito hacia Bilbao, España, desarraigada y prácticamente expulsada de su tierra, que probablemente nunca más volverá a ver, como botón de muestra de todas las angustias percibidas en su viaje.
Peor suerte corrieron las mujeres que no pudieron salir de Ucrania ya que la comisionada para los Derechos Humanos de la Verjovna Rada, Lyudmyla Denisova, aseveró en conferencia de prensa que había muchas razones para decir que las violaciones en los territorios ocupados por Rusia fueron masivas, según el sitio Ukrinform.
"Conté sobre 25 mujeres, que estuvieron retenidas en el sótano de Bucha, que tenían entre 14 y 24 años. Actualmente hay nueve mujeres embarazadas”, dijo Denisova.
Dijo que las mujeres, que han sido abusadas sexualmente por soldados enemigos, viajan y se enteran de sus embarazos en el extranjero, donde son recibidas como refugiadas.
"Conocemos un caso en Polonia donde el aborto ya está prohibido. Allí este tema se suele resolver por organizaciones de derechos humanos. Es muy difícil que una mujer piense que va a tener un hijo de un agresor que se lo hizo”, dijo la defensora del pueblo.
Según ella, la mayoría de las mujeres violadas no quieren hablar del tema, por lo que actualmente solo se conoce apenas una parte de esos delitos.
Denisova denunció que alrededor de 25 niñas y mujeres, de 14 a 24 años, fueron violadas sistemáticamente por soldados rusos durante la ocupación en el sótano de una casa en Bucha.
Varios funcionarios de ONU pidieron el lunes en el Consejo de Seguridad investigar la violencia contra las mujeres en la guerra librada tras la invasión rusa a Ucrania y demandaron proteger a los niños.
“Cada vez más escuchamos hablar de violaciones y violencia sexual”, expresó Sima Bahous, directora de la agencia ONU Mujeres.
Los títulos de los medios occidentales son elocuentes cuando informan de casos en los que mujeres que salieron de Ucrania aseguran que fueron violadas y sus maridos asesinados; otros señalan que algunas víctimas fueron ultimadas después de los ultrajes.