Las tropas y tanques israelíes penetraron el sábado en zonas de un congestionado 
distrito del norte de la Franja de Gaza que habían bordeado anteriormente en los más de siete meses de guerra, matando e hiriendo a decenas de palestinos, informaron médicos y residentes.

Las fuerzas israelíes también tomaron parte del terreno en Ráfah, una ciudad del sur próxima a la frontera egipcia que está repleta de desplazados y donde el lanzamiento este mes de una 
incursión largamente amenazada para aplastar los reductos de Hamás alarmó a El Cairo y Washington.

En lo que los medios israelíes dijeron que era el resultado de la inteligencia recopilada durante las últimas incursiones, el ejército anunció la recuperación del cuerpo de un hombre que estaba entre los más de 250 rehenes tomados por Hamás en un ataque transfronterizo el 7 de octubre que desencadenó la guerra.

Los restos de Ron Binyamin fueron localizados junto con los de otros tres rehenes asesinados cuya repatriación fue anunciada el viernes, dijeron los militares sin proporcionar más detalles.

Este mes, Israel volvió a realizar barridos militares en partes del norte de Gaza, donde en enero había declarado el fin de las operaciones de gran envergadura. En aquel momento, también predijo que sus fuerzas volverían para impedir un reagrupamiento del grupo islamista palestino que gobierna Gaza.

Uno de los lugares fue Jabalia, el mayor de los ocho campos de refugiados históricos de la Franja de Gaza. El sábado, las tropas y los tanques se adentraron en las calles que hasta ahora se habían librado de la ofensiva terrestre, dijeron los residentes. 

En un ataque, según los médicos, murieron 15 palestinos y decenas resultaron heridos.

Por su parte, el Ejército israelí aseguró que las fuerzas siguen operando en zonas de toda la Franja de Gaza, incluidas Jabalia y Ráfah, llevando a cabo lo que denominó "operaciones precisas contra terroristas e infraestructuras".

"La IAF (fuerza aérea) sigue operando en la Franja de Gaza y atacó más de 70 objetivos terroristas durante el último día, incluidos almacenes de armas, infraestructuras militares, 
terroristas que suponían una amenaza para las tropas de las IDF y complejos militares", dijo el ejército en un comunicado.

AUMENTO DE MUERTOS

Los brazos armados de Hamás, la Yihad Islámica y Al Fatah dijeron que los combatientes atacaron a las fuerzas israelíes en Jabalia y Ráfah con cohetes antitanque, bombas de mortero y artefactos explosivos ya colocados en algunas de las carreteras, matando e hiriendo a muchos soldados.

Según el ejército israelí, 281 soldados murieron en combates desde las primeras incursiones terrestres en Gaza, el 20 de octubre.

Al menos 35.386 palestinos murieron en ataques israelíes desde el 7 de octubre, según cifras del Ministerio de Salud del enclave, mientras que las agencias de ayuda advirtieron en repetidas ocasiones del hambre generalizada y la grave escasez de combustible y suministros médicos.

En el ataque de Hamás del 7 de octubre fallecieron 1.200 personas, de acuerdo al recuento de Israel. Unas 125 personas siguen retenidas en Gaza.

En Ráfah, donde los tanques israelíes penetraron en algunos de los suburbios orientales y se enfrentaron allí con combatientes palestinos, los residentes dijeron que los bombardeos israelíes 
desde el aire y desde tierra persistieron toda la noche.

Ráfah había estado albergando a más de un millón de gazatíes desplazados. La UNRWA, la principal agencia de ayuda de la ONU para los palestinos, dijo el sábado que cerca de 800.000 
palestinos habían huido de Ráfah desde que comenzó la ofensiva el 6 de mayo.

Israel afirma que debe capturar Ráfah para destruir a Hamás y garantizar la seguridad del país.