Fuerzas hutíes en Yemen atacaron posiciones en Arabia Saudita
Anteriormente, aviones de combate de la coalición que lidera Arabia Saudita lanzaron 65 ataques en varias provincias yemeníes.
Las fuerzas hutíes en Yemen, que controlan gran parte del país, lanzaron un ataque coordinado con drone en posiciones de Arabia Saudita, que incluye una refinería así como dos aeropuertos, reportaron este sábado fuentes militares en Saná.
Este ataque se produce un día después que el portavoz del ejército yemenita, general Yahya Sari, advirtiera sobre las graves consecuencias para las fuerzas de agresión como resultado de su escala contra el país.
Anteriormente, aviones de combate de la coalición que lidera Arabia Saudita lanzaron 65 ataques en varias provincias yemenitas
El portavoz militar dijo en conferencia de prensa televisada este sábado que el grupo había atacado las refinerías de Aramco en Jeddah, así como objetivos militares en Riad, Jeddah, Abha, Jizan y Najran.
Sari dijo que los ataques fueron en respuesta a la escalada de "agresión" de la coalición árabe liderada por Arabia Saudita "y la continuación de sus crímenes y asedio" de Yemen.
La operación, llamada Equilibrio de disuasión 8, se ha realizado con el apoyo del movimiento popular yemení Ansarolá y mediante cuatro aviones no tripulados (drones) Samad-3.
Conforme al general Sari, las fuerzas yemeníes también han atacado con cuatro drones Samad-2 contra la base aérea saudí Rey Abdulá y las instalaciones de la compañía petrolera estatal Aramco, en la ciudad de Yida, en el este del país árabe.
Es más, el ejército yemení ha lanzado ataques con drones contra el aeropuerto de Abha, así como blancos militares en las regiones de Yizan y Nayran, todos en el suroeste de Arabia Saudí.
Los rebeldes chiítas hutíes de Yemen dijeron que usaron drones para atacar las refinerías de Saudi Aramco y el aeropuerto rey Abdullah en Jeddah, así como objetivos en el aeropuerto de Abha.
Desde la salida obligada del presidente Abdrabbuh Mansour Hadi en 2015, que al día de hoy es reconocido como el máximo mandatario de Yemen por la Organización de Naciones Unidas (ONU), inició un conflicto entre las fuerzas hutíes y la coalición militar liderada por Arabia Saudita.
El grupo de los hutíes, musulmanes chiítas que llevaron a cabo un golpe de estado en septiembre de 2014 para devolver el poder al expresidente Ali Abdullah Saleh.
En marzo de 2015 Arabia Saudita, país vecino muy rico en petróleo, junto a otros países árabes y apoyados por Estados Unidos, Reino Unido y Francia, lanzaron ataques aéreos contra Yemen. El objetivo era acabar con los guerrilleros hutíes, respaldados por Irán, y dar apoyo así al gobierno de Hadi.
Pero aquella intervención fracasó y desde entonces Yemen está sumido en un conflicto permanente, al que se le suman los ataques del grupo terrorista Al Qaeda en la Península Arábiga (AQPA) y de otros grupos terroristas afines al Estado Islámico (EI).
Según el Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas, más de 20 millones de personas necesitan ayuda humanitaria para poder sobrevivir y hasta 4 millones han tenido que huir de sus hogares a consecuencia de los bombardeos y la violencia, convirtiéndose así en desplazados internos.