El fiscal de distrito de Nueva York, Cyrus Vance Jr. ha convocado a un gran jurado para evaluar las evidencias que ha recabado durante su investigación a Donald Tump y su organización para evaluar si presentará cargos en contra del expresidente y otros miembros de la Corporación Trump.

Aunque la fiscalía neoyorquina no respondió a solicitudes de información al respecto, la convocatoria a un gran jurado indicaría que ha encontrado evidencia de algún tipo de crimen, no necesariamente por parte del exmandatario, pero de alguien dentro de la organización, potencialmente cercano a él.

La investigación de Vance, que ya superó los dos años, podría estar en sus fases finales, de acuerdo con la información que presenta el famoso diario de Washington DC.

Originalmente, Vance investigaba los pagos que recibieron dos mujeres que dicen haber tenido relaciones extramaritales con Trump antes de la campaña presidencia del 2016 y posibles manipulaciones de documentos comerciales.

En ese momento, la fiscalía no identificó el enfoque de su investigación, pero dijo que unos reportes noticiosos del año pasado sobre prácticas comerciales de Trump, “que no fueron negados”, dejaron en claro que tenía base legal para pedir las declaraciones de impuesto.

En enero, Vance obtuvo las declaraciones de impuestos de Trump que solicitaba desde hace meses. 

A mediados de mayo la oficina de la fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James, que ya estaba llevando a cabo una investigación civil de la compañía del expresidente, indicó que está investigando criminalmente a la Organización Trump.

“Hemos informado a la Organización Trump que nuestra investigación sobre la organización ya no es de naturaleza puramente civil. Ahora estamos investigando activamente a la Organización Trump en calidad de criminal, junto con el fiscal de distrito de Manhattan. No tenemos comentarios adicionales en este momento ", dijo en un comunicado Fabien Levy, portavoz de la oficina del fiscal general de Nueva York.

James lidera una investigación criminal sobre si la compañía de Trump informó falsamente el valor de las propiedades para garantizar préstamos y obtener beneficios económicos y fiscales. Su investigación se centraba en un edificio de oficinas de Trump en la ciudad de Nueva York, un hotel en Chicago y un campo de golf cerca de Los Ángeles.