Extranjeros abandonan Sudán mientras continúan los combates entre el ejército y paramilitares
Los enfrentamientos llevan una semana y murieron cientos de civiles. Se registraban ataques aéreos en el centro de Jartum, la capital.
Algunos ciudadanos extranjeros empezaron a ser evacuados de Sudán el sábado, tras una semana de enfrentamientos en los que han muerto cientos de civiles, mientras el ejército lanzaba ataques aéreos contra una fuerza paramilitar rival durante combates en el centro de Jartum.
La sangrienta embestida de la guerra urbana ha atrapado a muchas personas en la capital sudanesa. El aeropuerto ha sido blanco de repetidos ataques y residentes no han podido abandonar sus hogares ni salir de la ciudad hacia zonas más seguras.
Naciones Unidas y varios países han instado a los líderes militares rivales a respetar los altos el fuego declarados, que en la mayoría de los casos se han ignorado, y a abrir pasos seguros tanto para los civiles que huyen como para el suministro de la ayuda.
Con el aeropuerto cerrado y los cielos inseguros, miles de extranjeros -entre ellos personal de embajadas, cooperantes y estudiantes en Jartum y otros lugares del tercer país más grande de África- tampoco han podido salir.
El ejército declaró a primera hora del sábado que habilitaría vías seguras para evacuar a ciudadanos de Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia y China, mientras que Arabia Saudí y Jordania ya estaban evacuando a través de Port Sudan, en el mar Rojo. Los aeropuertos de Jartum y Nyala, la mayor ciudad de Darfur, presentaban problemas, agregó.
LEÉ: Denunciaron choques entre fieles y policías en el Monasterio de las Cuevas de Kiev
Un diplomático extranjero que pidió no ser identificado dijo que parte del personal diplomático en Jartum esperaba ser evacuado por vía aérea desde Port Sudan en los próximos dos días.
La embajada de Estados Unidos advirtió a sus ciudadanos de que había "información incompleta" sobre los convoyes que salían de Jartum y que los viajes serían por cuenta y riesgo de cada uno.
El ejército y la FAR paramilitar, que libran una mortífera lucha por el poder en todo el país, habían emitido sendos comunicados en los que anunciaron que mantendrían un alto el fuego de tres días a partir del viernes, con motivo de la festividad islámica de Eid al-Fitr.
El súbito colapso bélico de Sudán hace una semana echó por tierra los planes de restaurar el Gobierno civil, mientras llevó a un país ya empobrecido al borde de la catástrofe humanitaria y amenaza con un conflicto más amplio que podría atraer a potencias extranjeras.
Todavía no hay señales de que ninguna de las partes pueda asegurar una victoria rápida o esté dispuesta a retroceder y dialogar. El ejército dispone de poder aéreo, pero la FAR está ampliamente implantada en zonas urbanas, incluidos los alrededores de instalaciones clave en el centro de Jartum.
(Reporte de Khalid Abdelaziz en Jartum y Nafisa Eltahir en El Cairo, Reuters)