Excluida como candidata, Machado motoriza la opción opositora en Venezuela
La dirigente opositora no pudo competir por una inhabilitación judicial y encaró la construcción del armado que encabeza González Urrutia.
María Corina Machado no será candidata presidencial este domingo pero fue la armadora del espacio opositor que con Edmundo González Urrutia a la cabeza busca destronar al oficialista Nicolás Maduro en las elecciones nacionales de Venezuela.
La dirigente opositora iba a postularse en estos comicios, pero quedó afuera de la competencia inhabilitada por la justicia local.
Tras haber ganado las internas de su partido con amplio margen meses atrás, Machado se encaminaba a ser la principal opción al chavismo este 28 de mayo, hasta que el Tribunal Supremo de Justicia venezolano la inhabilitó y frustró sus intenciones.
El fallo en su contra fue por considerarla dentro de un presunto caso de corrupción.
Ante esa situación, la dirigente venezolana encaró la construcción de una alianza que terminó con el ex diplomático González Urrutia como candidato presidencial.
En caso de ganar las elecciones, González Urrutia prometió darle el cargo que quiera, algo que todavía la referente opositora prefirió no esclarecer.
Machado inició su carrera política en 2002 cuando fundó Súmate, un grupo de defensa de los derechos de votantes.
Ingresó a la Asamblea Nacional en 2010, siendo la diputada más votada y se destacó por su oposición a la gestión del fallecido Hugo Chávez, a quien cuestionó principalmente por sus decisiones de expropiar empresas.
Tiene 56 años, estudió en un internado en Massachusetts, Estados Unidos, y luego se recibió de Ingeniera Industrial en la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB).
En las últimas semanas se mostró muy activa en la campaña de González Urrutia, a quien respalda para suceder a Maduro, y logró capitalizar el descontento contra la administración chavista que se fue acumulando en los últimos años, teniendo ahora chances de desbancarlo del poder.