Estados Unidos ordenó este martes a una parte de su personal restante en la embajada en Kabul que se retire de Afganistán, alegando como causa crecientes amenazas en momentos en que el ejército estadounidense organiza la salida del país tras 20 años de guerra.

El Departamento de Estado del país norteamericano dijo que había dado instrucciones a todo el personal para que abandonara el país, a menos que su trabajo requiriera su presencia física en Afganistán. Aunque la orden no especificaba el número de personas afectadas, iba mucho más allá del habitual recorte de personal por razones de seguridad y protección. Usualmente este tipo de órdenes se aplican sólo al personal no esencial.

En una advertencia de viaje actualizada para Afganistán, el departamento indicó que había ordenado la salida de todos los empleados del gobierno de Estados Unidos “cuyas funciones pueden ser realizadas en otro lugar”.

Asimismo, señaló que los ciudadanos estadounidenses no debían viajar a Afganistán y que los que desearan partir “debían hacerlo lo antes posible en los vuelos comerciales disponibles.”

La disposición del Departamento de Estado se realizó sólo dos días después de que el principal general de Estados Unidos en Afganistán dijera que el ejército estadounidense había comenzado a cerrar sus operaciones en el país y que las fuerzas de seguridad afganas tenían que estar preparadas para tomar el relevo.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció hace dos semanas la decisión de retirar las tropas estadounidense de Afganistán antes del vigésimo aniversario de los atentados del 11 de septiembre de 2001, al tiempo que afirmó: "Es hora de acabar con la guerra más larga de Estados Unidos".

Fuente: AP / EFE /AFP